La comisión informativa del Ayuntamiento de Cuenca rechazó el pasado 18 de febrero las alegaciones presentadas por varios colectivos sociales a la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Además, no se permitió la intervención de un representante de estas asociaciones en la sesión, tal y como estos colectivos han explicado en una nota de prensa.
Las alegaciones fueron presentadas de manera conjunta por la Asociación de Vecinos del Centro, Cuenca en Bici, Ecologistas en Acción y la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Cuenca (FAMPA-CU). Estas entidades defienden un modelo de movilidad basado en la mejora del transporte público, la reducción del tráfico en el centro, el fomento de la movilidad activa y un seguimiento efectivo de la ZBE. Según afirman, su propuesta busca hacer de Cuenca una ciudad más habitable para los vecinos, en contraposición a la ordenanza municipal, que consideran centrada exclusivamente en restringir el acceso de determinados vehículos en función de su etiqueta ambiental.
Falta de participación en la tramitación
Los colectivos han denunciado la escasa participación ciudadana en la elaboración de la ordenanza. Aseguran que no han podido organizar jornadas abiertas para debatir sobre la ZBE y que la información disponible en la web municipal es limitada, sin acceso a datos clave como la calidad del aire o los flujos de tráfico.
El equipo de Gobierno justificó el rechazo de las alegaciones alegando que la propuesta de los colectivos «no se ajusta a derecho». No obstante, los movimientos sociales defienden que su modelo sigue el ejemplo de la ZBE de Pontevedra, que no impone restricciones en función de las etiquetas ambientales y fue aprobado por la Dirección General de Tráfico hace más de un año.
Próxima votación en el pleno municipal
La ordenanza sigue su curso y será sometida a votación definitiva en el pleno del 24 de febrero. En la comisión previa, Cuenca en Marcha-Unidas por Cuenca y Vox votaron en contra del texto, mientras que el Partido Popular se abstuvo. Los colectivos han hecho un llamamiento a este último grupo municipal para que vote en contra de la ordenanza y permita una modificación del texto con mayor participación ciudadana.
Desde Ecologistas en Acción han expresado su preocupación por la posible aprobación de la ordenanza en su forma actual, argumentando que podría generar desigualdades económicas al penalizar a quienes no pueden permitirse un vehículo con mejor etiqueta ambiental. Asimismo, critican la falta de objetivos concretos de reducción de emisiones contaminantes, ya que la normativa se centra únicamente en la mejora de la calidad acústica.
El ingeniero Juan Morales, asesor técnico de la propuesta alternativa, ha insistido en que su modelo cumple con la normativa vigente y ha cuestionado la efectividad del planteamiento municipal para reducir las emisiones contaminantes en la ciudad.
La votación del próximo lunes será clave para definir el futuro de la ZBE en Cuenca.
La Zona de Bajas Emisiones volverá a ser abordada en el pleno de febrero tras «no llegar» al de enero