El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha llamado a la responsabilidad contra el botellón durante la jornada del Domingo de Ramos. Ha instado, tanto a conquenses como a los visitantes que pasarán por la ciudad durante estas jornadas, a que sean «responsables».
El primer edil ha realizado esta afirmación después de que el pasado año saltaran todas las previsiones con el botellón del Domingo de Ramos, lo que provocó malestar y quejas entre los vecinos del Casco Antiguo. «En los últimos años la gente se quede en la Plaza Mayor tomando botellines o lo que deseen generando situaciones que no son agradables», ha manifestado Dolz. Además, ha recordado que este año se contará con varias Unidades de Prevención y Reacción de la Policía Nacional (UPR) durante el desarrollo de la Semana Santa, concretamente para el Domingo de Ramos y la madrugada del Jueves al Viernes Santo. Cuyo objetivo es «disuadir a la gente que haga cosas que no sean razonables».
El representante municipal ha ido más allá y ha manifestado que «si alguien quiere hacer una discoteca en las calles del entorno de la Plaza Mayor, que sepan que no la pueden hacer. Está prohibido hacer discotecas en la calle», ha insistido.
Para el Domingo de Ramos, la primera jornada de la Semana Santa, la ciudad se blindará con seguridad privada sufragada por el Ayuntamiento, Policía y una unidad de UPR, cada unidad dotada de entre doce y dieciséis efectivos. El dispositivo de seguridad que se desplegará en la ciudad para estos días contará con 400 efectivos. El alcalde ha concluido argumentando que «la Semana Santa es uno de los estandartes de la ciudad, la época del año donde más turistas nos vistan, llegando, incluso, a duplicar la población de la ciudad, y lo que tenemos que ser todos es valedores de ese emblema que es la Semana Santa para la ciudad de Cuenca».
Tráfico en la ciudad
Sobre las medidas que pondrá en marcha el consistorio conquense para apaciguar el tráfico en la ciudad durante la celebración de la Semana Santa, Darío Dolz ha informado sobre la puesta en marcha de aparcamientos disuasorios en las distintas entradas de la ciudad «para que el que venga de fuera deje ahí los vehículos y ande por la ciudad, que es una ciudad que permite andar muy cómodamente, aunque tengamos cuestas, algo que también es saludable».
Además, el primer edil ha recordado que el tráfico rodado quedará cortado en «la inmensa mayoría de esos días». «Hay jornadas, en los que ese cercioramiento es total, me refiero desde el mediodía del Jueves Santo hasta el final de la procesión del Santo Entierro en el Viernes Santo», ha argumentado.