El sindicato UGT ha denunciado el «reiterado incumplimiento» del convenio colectivo «por parte de la empresa que gestiona el transporte sanitario en Cuenca -Ambulancias Cuenca-, un incumplimiento que se viene produciendo desde el mismo momento en el que asumió la gestión, llegando a mantener condiciones laborales muy desfavorables para los trabajadores y trabajadores respecto al resto de la región».
Desde el sindicato apuntan que «Ambulancias Cuencas tampoco da cumplimiento al nuevo convenio colectivo y eso a pesar de los acuerdos de la Comisión Paritaria para el pago de los atrasos del convenio y tras haber alcanzado un acuerdo con el Servicio Público de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam)».
“En cuanto a la jornada, la empresa ha decidido inventarse una figura denominada ‘guardias adicionales’ inexistente tanto en el convenio regional como en el estatal. Esto supone, no solo que el personal realice menos guardias de las establecidas, sino que estas se abonen muy por debajo del precio establecido para las guardias del servicio urgente, lo que representa una reducción en las retribuciones y el abono de estas guardias ‘inventadas’ por debajo del convenio”, pone de manifiesto José Manuel Pinillos Rubio, secretario de Organización de FeSP-UGT Castilla-La Mancha.
Estas guardias adicionales por debajo del precio de convenio son “ofrecidas” por la empresa a determinado personal, «provocando una doble escala salarial en la que determinados colectivos se ven obligados a realizar guardias abonadas muy por debajo de lo establecido de forma general para todos los profesionales». Otro de los aspectos incumplidos que tiene impacto en las retribuciones «es que es la única empresa que no abona las dietas ni ofrece alguna alternativa a pesar de estar obligados por convenio colectivo».
«Al margen de la normativa laboral»
UGT indica que el convenio también obliga a establecer un sistema de movilidad y promoción interna con criterios objetivos, «pero esta empresa no solo no ha establecido este sistema sino que utiliza la movilidad y la promoción interna para favorecer o perjudicar a determinadas personas. Queda completamente a criterio de la empresa la asignación de bases y puestos de trabajo, algo que colisiona con el texto del convenio colectivo y con los principios que deben regir a una empresa que presta servicio para la Administración”, añade Pinillos.
“Hace meses el gerente de la empresa exigía de forma pública responsabilidad tanto al Sescam como a los agentes sociales cuando es su empresa la que carece de toda responsabilidad hacia sus profesionales y la que actúa al margen de la normativa laboral, especialmente del convenio colectivo, que desde la adjudicación en el 2017 no ha cumplido en ningún momento y no tiene intención de hacerlo”.
Desde UGT exigen a la empresa «que cumpla el convenio colectivo íntegramente y que abandone una política de gestión de personal absolutamente arbitraria. Hay que recordar que -a pesar de la incompetencia e irresponsabilidad en la gestión de su personal, de tener condiciones muy por debajo del convenio colectivo, de los continuos incumplimientos por parte de la empresa y en general de la lamentable gestión que esta empresa viene realizando sobre el servicio público, con políticas de personal más propias de siglos anteriores- sus profesionales, al igual que en el resto de la región, han respondido de forma excepcional a las necesidades de la población en uno de los peores momentos que se recuerdan en el ámbito sanitario, algo que parece importar poco a las empresas que ponen su balance económico por encima del servicio público y de las condiciones de trabajo».
Por eso, el sindicato insta a la Administración «a reflexionar a la hora de ceder la gestión de un servicio público esencial».