Vecinos de El Caño de Tarancón denuncian los incendios causados por el abandono y la falta de mantenimiento

El Ayuntamiento de Tarancón atribuye el deterioro de El Caño “al incivismo de algunos vecinos”

Vecinos del entorno de “El Caño”, en pleno centro histórico de Tarancón, han denunciado la falta de acción por parte del consistorio de la ciudad que ha desembocado en “acumulación de residuos tanto en la calle como en solares privados, zonas ajardinadas que más bien parecen una selva e inseguridad en general”. Los vecinos, dicen, que el resultado a años de olvido se puso de manifiesto la noche del 27 de febrero con el fuego que se produjo en uno de los solares privados en los que la acumulación de basuras “fue el detonante”, aseguran.

El incendio se produjo alrededor de la medianoche y fueron los vecinos de las casas colindantes quienes dieron la voz de alarma. María Jesús Romero, una de las vecinas de la zona, asegura que “nos dimos cuenta una vez las llamas medían casi tres metros de alto, porque debido a la inseguridad que se respira en el barrio tienes que cerrarte como si fuera un búnker”. En lo que a la respuesta de efectivos se refiere, Romero agradece la actuación llevada a cabo por la Guardia Civil, “son los únicos que nos hacen ya caso, la policía ya no quiere ni venir”. Por su parte, Romero asegura que los bomberos se demoraron “más de media hora” en personarse pese a que tanto los vecinos a título particular como los efectivos de la Guardia Civil que allí se desplazaron “no dejábamos de dar aviso porque teníamos miedo de que el fuego acabara con nuestras casas”.

Este no ha sido el primer incidente con fuego según refieren los vecinos de la zona. María Jesús Romero apunta que “solo en mi calle ha habido tres incendios, pero ha habido otros tantos en otras zonas de El Caño”. Los incendios, apunta Romero “han ido produciéndose paralelos al deterioro del barrio”.

María Jesús Romero comenta que “los problemas no vienen de ahora”, si no que llevan años acrecentándose “sin una solución por parte del Ayuntamiento”. Romero vive actualmente en la casa familiar que “mis padres, como tantos otros residentes de la zona compraron tras una vida de esfuerzo” y que sus progenitores han tenido que abandonar debido a que “la situación era insostenible” y “les estaba afectando a su salud mental”. La vecina asegura que “las complicaciones comenzaron hace más de 20 años”, pero que fue “en torno a 2019” cuando se volvieron “insostenibles”.

Numerosos escritos, manifestaciones y quejas son las vías por las que los vecinos han tratado de dejar constancia de su descontento y de las necesidades que presenta el barrio. Romero manifiesta que, “pese a que todos estos recursos han llegado al Ayuntamiento la respuesta que hemos recibido todos ha sido que estos procesos son lentos y que tenemos que tener paciencia”. La propia vecina, ante la situación asegura que “hace menos de un mes, concretamente el 22 de enero” se dirigió “al registro de la propiedad en compañía de mi madre” para tratar de averiguar quién era el propietario de uno de los solares privados más problemáticos. Esta visita, señala Romero, se saldó con la promesa del Ayuntamiento de ponerse en contacto con los propietarios de los solares en malas condiciones para advertirles que debían arreglar sus propiedades.

Los vecinos no son los únicos afectados en esta situación, Romero señala que los efectivos del servicio municipal de limpieza manifiestan de viva voz la suciedad que se acumula en las calles por la falta de civismo. En lo referente a las parcelas municipales correspondientes a zonas ajardinadas la vecina denuncia también la falta de mantenimiento a la que se han visto sometidas. “Justo frente a mi casa hay un pequeño jardín que vinieron a arreglar efectivos del ayuntamiento hace unas semanas”, refiere Romero, “los jardineros únicamente podaron los rosales, pero dejaron el resto tal y como estaba, con hierba que debe superar los 40 centímetros de altura”.

Barrio de El Caño antes de que comenzaran los problemas. FOTO: María Jesús Romero

En lo que a mantenimiento de solares privados se refiere, la vecina apunta que “en muchas ocasiones hemos sido los propios vecinos quienes nos hemos ocupado del mantenimiento por miedo a que afectara a nuestras casas, que con tanto esfuerzo mantenemos”. Romero afirma que “en el solar que está pegado a mi casa había un árbol con las ramas a punto de tirar la tapia de la luz, tuvimos que llamar a una amiga mía que es jardinera para que lo podara y eso fue lo que salvó mi casa de quemarse el otro día”.

Los vecinos denuncian que el consistorio es consciente de la situación porque “ha dejado de pasar por esta zona el Vía Crucis por el estado de suciedad en el que se encontraban las calles”. Romero señala que “esta zona no se limpia, el único momento en el que se pone especial atención en El Caño es cuando hay gachas o alguna celebración popular, y aún así solo limpian lo que se ve, a esta zona no llegan nunca”.

Por su parte, el Ayuntamiento ha referido a Voces de Cuenca que conocen la problemática que asola el barrio que, dicen, es “básicamente motivada por el incivismo de algunos vecinos”. El consistorio aclara que el mantenimiento habitual de la limpieza viaria por la empresa encargada así como el resto de prestaciones “se realizan igual que en otras zonas de la ciudad”. Fuentes municipales señalan que “no obstante, han sido numerosas las actuaciones específicas que se han llevado a cabo cuando se han detectado problemas”. Entre estas actuaciones extraordinarias señalan “tareas de limpieza puntuales incluso en solares privados por el peligro que revestía la acumulación de enseres y basura”, apuntando que se han iniciado los procedimientos necesarios para sancionar a los propietarios de dichos solares. El consistorio apunta que “hay procedimientos abiertos de órdenes de ejecución a varios propietarios de parcelas abandonadas”. Entretanto, el Ayuntamiento apunta que “lamentamos las molestias que esta situación está ocasionando a algunos vecinos, a los que atendemos de manera continuada” y que, además “se han reforzado las labores de vigilancia y control por parte de la Policía Local en colaboración con la empresa de limpieza FCC” en la barriada “para evitar la acumulación de residuos en lugares inapropiados, así como el incumplimiento de otras normas”.

Carteles de “En Venta” llenan el barrio porque, según afirma María Jesús Romero “la única solución que hemos encontrado ha sido malvender nuestras casas y marcharnos ante la inacción del Ayuntamiento”. Romero refiere que “es una pena que una zona como esta, que tiene una de las vistas más bonitas de la ciudad y que han pintado tantos artistas haya acabado en estas condiciones”.

Galería de imágenes del estado actual de los aledaños de “El Caño”