Jesús Gabaldón
Tal como estaba previsto por la pandemia, por segundo año consecutivo, dos de las populares barriadas de Tarancón han rendido pleitesía y honrado a los patronos de los barrios centrado en la celebración de la Eucaristía que han contado con el apoyo y la presencia del alcalde y otros miembros de la corporación municipal, tanto del equipo de Gobierno como el grupo popular.
El 14 de mayo, San Víctor y Santa Corona, copatronos de la ciudad, hasta mediados del siglo XIX fueron los titulares, la Hermandad que preside Dolores Párraga organizó la Eucaristía en la Parroquia ubicada en el barrio y dedicada precisamente a los Mártires. Una Eucaristía a la que asistió el alcalde acompañado por un nutrido grupo de ediles del Consistorio, así como numerosos vecinos, siguiendo en todo momento los protocolos sanitarios.
Emoción y devoción en la esperanza de poder recuperar cuanto antes la normalidad. No ha habido ofrenda de flores, si bien el Colegio Hermanas Mercedarias en esa jornada aprovechó en el mismo centro con escolares de primaria e infantil, puesto que estamos en el mes de María, de la Madre para hacer ofrenda floral en el mismo centro, siguiendo los protocolos sanitarios. Ni procesión, ni verbena, ni visita a la Residencia de Mayores, entre otros actos habituales en honor a San Víctor y Santa Corona.
San Isidro por su parte, la Eucaristía la celebró en la Parroquia Nuestra Sra. de la Asunción, hasta donde en vehículo se trasladó la imagen para ante el Altar presidir la misa en su honor. Contó con la presencia también el alcalde, varios concejales y las majas de la Peña el Mosto con miembros de la directiva de la misma, puesto que la sede social esta ubicada en el mismo barrio.
Tras la Eucaristía, en la ermita se expuso la imagen del patrón de los agricultores para poder ser visitado por los devotos. Además la bendición de campos, con la imagen en la puerta de la Ermita a cargo del párroco Miguel Alberto López.
De estos manera sencillo, con devoción estos dos barrios mantiene viva la llama en estas fechas, por la que se profesa hacia estas imágenes de los Mártires y el Santo Labrador. Además se han unido algunas otras hermandades a estas eucaristía en este nuevo año atípico para las fiestas de los barrios, haciendo votos por poder volver pronto la normalidad.
Y es que las directivas de las Hermandades siguen trabajando por mantener el espíritu devoto hacia sus patronos, abrir las ermitas y velar por el mantenimiento de tradiciones y costumbres en muchos casos ancestrales. Además de observarse que los jóvenes se incorporan a las directivas para garantizar la continuidad de las mismas.