La Diputación de Cuenca, el Instituto Geológico y Minero de España y el CSIC han llevado a cabo un estudio sobre el cambio de coloración en el agua del Lagunillo de las Tortugas de Cañada del Hoyo que coge un tono rosáceo. Este fenómeno es único y ha llamado la atención de los medios de comunicación y de la población en general, ya que comenzó a producirse desde el 2018 y no estaban claras las causas de este cambio, ahora el estudio ha corroborado que la causante del tono rosa es la bacteria Thiocapsa que se encuentra a un metro y medio de la superficie y emerge con la bajada de las temperaturas.
El presidente, Álvaro Martínez Chana, ha visitado la zona junto a Marta Peñuelas, presidenta de la Asociación de Mujeres Empresarias de Cuenca y natural de esta localidad, Marta Peñuela, y el propietario de la finca, Leopoldo Cerezuela, donde se encuentra ubicada esta laguna. Martínez Chana ha querido explicar los resultados de este estudio que arrojan que esta bacteria es la causante del color que “consume de forma anaeróbica los sulfatos”.
Según arrojan las conclusiones de los expertos, en las épocas en las que bajan las temperaturas rápidamente puede ocurrir un proceso de inversión térmica en el Lagunillo de las Tortugas. El agua de la superficie se hace más densa y pesada con el frío, con lo que se produce un hundimiento de la misma. En su lugar afloran, en superficie, las aguas más cálidas de zonas más profundas colonizadas por la bacteria Thiocapsa, que “están todo el año rosa”, según ha apuntado Martínez Chana.
Esto añade un atractivo más al monumento natural del complejo lagunar de Cañada del Hoyo, uno de los más bonitos de toda Castilla-La Mancha, no obstante, el presidente también ha querido pedir mesura y respeto hacia los turistas para que no masifiquen la zona, ya que se trata de un medio natural que debe preservarse y cuidarse por encima de todas las cosas. La representante de las mujeres empresarias ha agradecido al presidente su visita y ha destacado la importancia que tienen las lagunas de Cañada del Hoyo para atraer visitantes, ya que ofrece una oportunidad a todo el tejido hostelero de la zona.
Estudio Lagunilla de las Tortugas
El estudio ha llevado a cabo vuelos con drones por la zona para detallar la zona de estudio, posteriormente se ha llevado a cabo un análisis hidroquímico de los años 2018, 2020 y 2021. una campaña de muestreo vertical del Lagunillo de las Tortugas para caracterizar el perfil de la lámina de agua. Mediante el uso de una barca se tomaron muestras de la superficie de la laguna, a 1,7 m de profundidad, 3 m, 4 m y 4,6 m (fondo), mientras se tomaban parámetros in situ con una sonda multiparamétrica en todo el perfil de la lámina de agua. La muestra tomada a 1,7 m de profundidad es la que presenta el color rosa más intenso, aunque a partir de esta profundidad, todas las muestras tienen este color en distintas tonalidades.
En junio 2021 también se procedió a tomar una muestra del material presente en la cubeta que forma el Lagunillo de las Tortugas (margas cretácicas) con el fin de analizar el lixiviado de las mismas y obtener una posible procedencia de los sulfatos presentes en las aguas del Lagunillo.
Tanto el Lagunillo de las Tortugas como el río Guadazaón presentan facies hidroquímica bicarbonatada-sulfatada, a diferencia del resto de lagunas y puntos de agua de la zona, que presentan facies bicarbonatada, lo que parece indicar una desconexión hídrica del resto de lagunas o un aporte de sulfatos que no afecta a las demás lagunas.
En los diferentes muestreos en el Lagunillo de las Tortugas se ha observado que el agua es de color rosa en profundidad, incluso en las épocas en que es marrón en la superficie. El análisis microbiológico indica la presencia de la bacteria Thiocapsa, una sulfobacteria responsable del cambio de coloración del agua a tonos rosáceos.