Quejas por el mal estado y la suciedad del entorno de la Iglesia de la Villanueva de los Escuderos

El Grupo Municipal Popular ha solicitado al Equipo de Gobierno que, a corto plazo, adecúe esta zona debido a la celebración de las fiestas patronales de esta pedanía este fin de semana

El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca, a través de su concejal Julián Niño, ha solicitado al Equipo de Gobierno que «muestre interés y atienda a las pedanías», ya que consideran que «están completamente abandonadas y descuidadas».

Así lo han expresado a través de una nota de prensa, en la que recuerdan que «los vecinos de las pedanías tienen los mismos derechos que los de la capital conquense». Niño se ha referido en concreto a Villanueva de los Escuderos, que celebra este fin de semana sus fiestas patronales en honor a San Antonio. «Según nos trasladan los vecinos, las calles y el entorno de la iglesia se encuentran en un estado deplorable», explica el concejal.

En esta iglesia se celebrará la misa y desde ahí partirá la procesión y, según explica el comunicado, «el firme está en mal estado en muchos puntos, hay suciedad y maleza y que no han sido retiradas desde hace mucho tiempo».

El Grupo Municipal Popular afirma que los vecinos también han mostrado quejas sobre el estado de la propia iglesia de la Asunción, «que debería tener un correcto mantenimiento para que no se deteriore con el paso de los años». Por todo ello, han solicitado a Darío Dolz, alcalde dela ciudad que «adecúe las calles y el entorno de la iglesia de Villanueva de los Escuderos en un plazo corto, para que no haya suciedad ni maleza al menos durante la celebración de las fiestas patronales». Además, le instan a que «a medio plazo, adquiera el compromiso firme de atender las necesidades de esta y todas las pedanías y dotarlas de un mantenimiento constante y adecuado».

La iglesia se caracteriza por tener un ábside semicircular, tener cubierto el interior del presbiterio con una esbelta cúpula semicircular renacentista; y un arco renacentista de medio punto a la entrada del presbiterio, que son obras de Esteban Jamete de Orleans.