La investigación sobre la muerte del cardenetero Isaac Guillén sigue revelando detalles y según ha podido saber el periódico Levante, el hijastro de 17 años ha confesado a la Fiscalía de Menores que fue su madre quien estranguló con cuerdas al hombre después de que ambos lo arrojasen vivo a la fosa excavada en la parcela que la presunta asesina, Beatriu F. C., había alquilado apenas mes y medio antes en Godelleta.
El diario valenciano señala que el menor confesó su participación en los hechos en cuento fue detenido y su declaración ha incluido detalles escabrosos de cómo su madre se habría deshecho del que fuera su marido en lo que parece un crimen por motivos económicos. Además, los médicos han detectado tierra en el aparato respiratorio de la víctima, lo que confirmaría que seguía con vida cuando le arrojaron las paletadas de tierra encima. Al parecer, el detallado relato incriminatorio, para él y para su madre, del adolescente casa en cada detalle con lo hallado por la Policía, por una parte, y, sobre todo, con lo observado por los forenses durante la autopsia.
Isaac Guillén, policía local de Godelleta, jubilado por enfermedad degenerativa que lo mantenía en una silla de ruedas, desapareció el pasado 1 de diciembre y su cadáver fue encontrado enterrado con signos de violencia en un terreno de Godelleta (Valencia). La parcela en la que fue hallado el cuerpo sin vida la tenía alquilada su mujer, que fue arrestada y fue considerada la principal sospechosa del crimen.
El Ayuntamiento de Cardenete declaró este miércoles tres días de luto oficial por la «cruel y violenta muerte» de su paisano.