Son ya varias las semanas en las que en las instalaciones de la Residencia de Mayores de Cañete, hasta el momento cerrada, se ha observado movimiento, sobre todo de obreros, que ultiman su puesta a punto, y también la llegada de muebles, como camas o sofás. Además, desde el Ayuntamiento de Cañete se ha hecho pública una oferta de trabajo en la que se solicita personal de limpieza, así como auxiliares de geriatría o enfermería. “Numerosos vecinos y alcaldes de pueblos de alrededor llevan días preguntando en el Ayuntamiento de Cañete y directamente a la alcaldesa, Montserrat Poyatos, por esta circunstancia, sobre todo para que confirmara o no el rumor de que la instalación iba a albergar solamente a enfermos positivos de COVID-19, obteniendo, hasta ahora, respuestas imprecisas y vagas a una preocupación más que lógica”, señala el Partido Popular en un comunicado.
Entre los vecinos del pueblo y las localidades cercanas se ha despertado inquietud, “por la falta de información y el secretismo con el que se está llevando este asunto, preocupación comprensible, dada la falta de planificación y de rigor de la Junta de Comunidades en la gestión de la pandemia, en especial, en las Residencias de Mayores”, defiende la formación política.
El pasado 2 de mayo, el responsable de Sanidad de la Junta, Jesús Fernández, confirmaba que, efectivamente, la Residencia de Cañete acogerá a mayores enfermos de coronavirus incluyéndola en un grupo junto a otras cuatro medicalizadas en la región, “donde hemos puesto a los peores, a las personas que están peor”, según el consejero en el Pleno celebrado en Toledo.
«En cuatro residencias y una quinta que tenemos ahora en marcha, que es la de Cañete en Cuenca, pero en cuatro residencias (Elder en Tomelloso, Centenari de Villacañas, Santo Cristo del Sahúco en Peñas de San Pedro y Siglo XXI en Guadalajara) y ahora como digo en Cañete, hemos hecho residencias medicalizadas», indicó el dirigente autonómico este sábado.
Ya a finales de marzo, el consejero apuntaba en rueda de prensa del uso o apertura de diferentes residencias, entre ellas la de Cañete, «a fin de ir separando a los pacientes positivos de los casos que están mejor, pidiendo disculpas por el hecho de que haya que mover a algunas personas y augurando que todo volverá a la normalidad».
Para amueblar el recinto Cañete, la Diputación Provincial de Cuenca, según señala el PP, ha concedido al Ayuntamiento de Cañete una subvención directa de algo más de 148.000 euros. “Son varias las cuestiones que surgen en estos momentos y que tanto desde la Junta, como desde la Diputación y por supuesto, el propio Ayuntamiento, deberían responder de inmediato ¿se va a equipar la Residencia con todas las garantías para atender a los mayores?, ¿desde qué localidades se van a trasladar los residentes a Cañete?, ¿van a contar los profesionales que los atiendan con los equipos de protección necesaria para no contagiarse? ¿se harán test tanto a los ancianos como a los profesionales y a los vecinos de la zona?”, se preguntan los populares.
La localidad de Cañete es referencia de numerosos pueblos de alrededor como Laguna del Marquesado, Huerta, Tejadillos, Alcalá de la Vega, Campillos Paravientos, La Huérguina, Salvacañete, Valdemoro, Valdemorillo, Tejadillos, Boniches, Zafrilla, Campillos Sierra, Salinas del Manzano o Pajaroncillo y cuyos vecinos lo visitan con frecuencia. “La primera obligación del Ayuntamiento de Cañete, en cuanto tuvo constancia de que tanto la Junta como la Diputación iban a abrir la Residencia, era haber demostrado lealtad con los pueblos más cercanos y haberles informado de ello y con todos los detalles. Ha demostrado una clara falta de lealtad y de compromiso con los municipios vecinos”, opina el PP conquense.
Para concluir los populares insisten en que “hay que garantizar que la apertura de la Residencia se lleva a cabo en condiciones óptimas, para ancianos, trabajadores y para los vecinos de Cañete y de alrededor y que no es fruto de una decisión momentánea”.
El Convenio para la construcción de la Residencia de Cañete se firmaba, junto al de la Residencia de Priego y de Beteta en 2007, bajo la presidencia regional de José María Barreda. La única que quedaría por ponerse en marcha sería la de la localidad de Beteta, «para la que había destinada, precisamente, un millón de euros por parte de la Diputación Provincial de Cuenca en la legislatura pasada, cantidad suprimida por el actual Equipo de Gobierno que preside el socialista Martínez Chana».