Del 6 al 12 de diciembre se contabilizaron en los municipios conquenses 243 positivos por coronavirus, 34 más que la semana anterior. Un incremento que llega además en una semana atípica por la concentración de hasta cuatro días inhábiles, lo que suele coincidir con un infradiagnóstico de casos y un retraso en la notificación.
La subida (del 16,2% para los que se entiendan mejor con porcentajes) es la propia de crecimiento sostenido pero mesurado. Al menos hasta el pasado domingo ya que los provisionales datos diarios provinciales apuntan a una expansión acelerada en las últimas fechas, pero ese análisis ya corresponderá al próximo informe de la Consejería de Sanidad.
El número de municipios afectados por al menos una infección se situó en 47, seis más que en la semana previa. En números absolutos la capital conquense vuelve a ser la más afectada, con casualmente también 47 positivos. Es el único municipio que supera la veintena, ya que los siguientes de la lista (Aliaguilla, San Clemente y Villagarcía del Llano) han contabilizado 16 cada uno. Casasimarro se queda en 14 y El Herrumblar pasa de 1 a 13.
Tanto Motilla del Palancar como Huete protagonizan significados descensos (de 18 a 8 y de 17 a 14 respectivamente) pero no dejan de encontrar nuevos casos. Gascueña firma un 0 tras 5 diagnósticos la semana previa y Tarancón recorre un camino en dirección contraria: de 0 a 7.
La incidencia acumulada se eleva a 230 casos por 100.000 habitantes a catorce días, lo que significa «riesgo medio» en la clasificación del Ministerio de Sanidad.
