Otra batalla hídrica. Desde la Unidad Sindical de Usuarios del Júcar (USUJ), entidad que aglutina a los 40.000 regantes de varias acequias junto a los usuarios industriales del río han manifestado su «sorpresa e indignación» ante la ausencia del Convenio del Embalse de Alarcón en el borrador del Plan Hidrológico del Júcar 2022-2027 que, en estos momentos, se encuentra en fase de información pública.
El viernes 23 de julio se cumplieron 20 años de la firma de este acuerdo entre USUJ, el Ministerio de Medio Ambiente y la Generalitat Valenciana. «Tras años de duras negociaciones, el Convenio del Embalse de Alarcón supuso una muestra de solidaridad de los regantes valencianos con el resto de usuarios del río Júcar y un verdadero ejemplo de cómo resolver los conflictos del agua por la vía del consenso. A través de este acuerdo, USUJ conseguía el cumplimiento de la sentencia del Tribunal Supremo de 12 de abril de 1983 que obligaba a la administración a la entrega del embalse que había sido sufragado al 100% por nosotros, y cedía su gestión a cambio de una serie de contraprestaciones: la garantía de una curva de reserva de agua para asegurar el riego de nuestros cultivos, la ejecución a cargo de las administraciones públicas de las necesarias obras de modernización de nuestros regadíos y la exención de los gastos de gestión, mantenimiento y explotación del embalse durante 60 años», señala en un comunicado Antonio Costa, el presidente de la USUJ.
Consideran los regantes del territorio vecino que «la ausencia del Convenio de Alarcón en el borrador del nuevo Plan Hidrológico del Júcar, que sí se ha recogido en los planes hidrológicos de 1998, 2014 y 2016, pone en peligro el patrimonio hidráulico de las 40.000 familias valencianas y supone un agravio para los 40.000 regantes que formamos USUJ y para el sector agrícola de la provincia de Valencia, especialmente, cuando las contraprestaciones de este documento están muy lejos de haberse conseguido».
Se reivindican «legítimos propietarios del Embalse de Alarcón» y exigen que se respeten «sus derechos de agua, las condiciones económicas pactadas y la finalización de las obras de modernización de regadíos que deberían haberse culminado en 2009».
La carta es respaldada por los integrantes de la Acequia Real del Júcar, la Real Acequia de Escalona, la Real Acequia de Carcaixent, la Acequia Mayor de Cuatro Pueblos y las Comunidades de Regantes de Sueca y Cullera