El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha confirmado la existencia de un total de nueve focos de la viruela ovina y caprina en España: tres en la provincia de Granada y seis en la provincia de Cuenca, todos ellos localizados en Villaescusa de Haro.
El primer foco ubicado en erritorio conquense fue notificado el pasado día 26 de septiembre en un centro de concentración con 890 animales. Posteriormente, han sido notificados el día 27 en un centro de producción de leche (7.654 ovejas) y el día 29 los cuatro restantes: dos cebaderos con 227 y 1.877 animales, un centro de concentración (5.075) y un centro de producción de leche (591). En total, ha sido sacrificados un total de 16.314 ovejas.
Según señala el Ministerio, las autoridades de Andalucía y Castilla-La Mancha «están adoptando las medidas de control contempladas en el Reglamento Delegado (UE) 2020/687 de la Comisión, por el que se completa el Reglamento (UE) 2016/429 del Parlamento Europeo y del Consejo en lo referente a las normas relativas a la prevención y el control de determinadas enfermedades de la lista, y que incluye el sacrificio de los animales, eliminación de los cadáveres en planta de trasformación, limpieza y desinfección oficial de la explotación, establecimiento de una zona de protección de 3km y una de vigilancia de 10km, con refuerzo de medidas de bioseguridad y vigilancia en las explotaciones, así como la aplicación de medidas de restricción de movimiento de animales y productos y la investigación epidemiológica para tratar de identificar el origen del virus, aún bajo estudio, así como los posibles contactos de riesgo que se hayan podido dar, entre otras».
Cabe recordar que se trata de una enfermedad no zoonósica que afecta exclusivamente a las especies ovina y caprina, sin que en ningún caso pueda transmitirse al ser humano, ni por contacto directo con los animales ni a través de productos de los mismos.