Sobre las 14:30 horas de la tarde del pasado lunes 4 de septiembre comenzó a llover con intensidad en Tarancón, situación que se prolongó hasta casi las 16:00 horas. En este tiempo se registró una acumulación de agua de 72 litros por metro cuadrado de media, con un pico de 100 L/m2. Esta cantidad queda muy lejos de los 18 L/m2 registrados en las lluvias del sábado y del domingo.
Pese a caer con tanta intensidad, las medidas de prevención tomadas en la localidad permitieron que la situación se solventase hacia las 18:30 horas de la tarde, poco más de dos horas después de que parase de llover.
Desde el Ayuntamiento de Tarancón también justifican esta rápida recuperación gracias al trabajo conjunto de Bomberos, Policía Local, Protección Civil, el servicio de Obras y Servicios y las empresas Aqualia y FCC, que gestionan el suministro de aguas y de limpieza, respectivamente. Por ejemplo, el Campo de San Isidro, que se anegó, a última hora de la tarde ya estaba recuperado y los operarios pudieron seguir montando el escenario donde se realizarán los conciertos de las Fiestas.
Aun así, durante la tormenta se llegaron a anegar varios garajes y calles, como las calles Pablo Iglesias, Donantes de Sangre, Girasoles o Adolfo Suárez. La peor parte, como suele suceder en estas situaciones de lluvias torrenciales, se la llevó un edificio de la Calle Asturias, en la Barriada del Congo. Aunque los vecinos protegieron las entradas y se liberaron las tapas de las alcantarillas para tragar más rápido, la gran cantidad de agua hizo que no dieran abasto y llegase a entrar en algún domicilio.
A las afueras de Tarancón el agua también provocó algún inconveniente en la A-3 entre Tarancón y Belinchón, pero no fue necesario cortarla.