Los diputados regionales Benjamín Prieto y María Roldán han reiterado este jueves su denuncia ante «el oscurantismo y la falta de información» en torno a la planta de reciclaje de Almonacid del Marquesado, desde que se iniciara su instalación y más en concreto, «a raíz del incendio que se producía el pasado sábado y cuyo humo llegó a extenderse hasta 20 kilómetros a la redonda». Ambos representantes conquenses en Las Cortes regionales manifestaban su apoyo a que hasta la provincia de Cuenca lleguen empresas que propicien un desarrollo industrial necesario, «pero siempre y cuando cumplan con las normas y garanticen que la salud de nuestros habitantes no va a verse afectada por efectos como la contaminación, por ejemplo, de cultivos o del agua».
Así, Prieto anunciaba que esta misma mañana ha presentado varias preguntas ante el Gobierno Regional «en aras a aclarar el preocupante suceso que ocurría en el municipio de Almonacid». «Toda la provincia, y por supuesto La Mancha Alta, tiene que saber a qué nos enfrentamos, qué falló para que se produjera el incendio», o si la planta de reciclaje «cumple con las exigencias necesarias para haber impedido el fuego o si se han realizado ya controles en la calidad de las aguas cercanas, del aire o del suelo para garantizar que no están contaminados», señalaba.
El diputado regional ha recordado que «son cerca de 100 los camiones que diariamente traen basura industrial de más de 300 tipos a esta planta y ha preguntado si esta cantidad no sobrepasa con creces lo inicialmente estipulado, ya vamos por las 53 hectáreas de estercolero en plena Mancha conquense, al lado de arroyos, del río Gigüela, de pozos de captación de agua y cerca de la reserva natural de El Hito y del Parque Arqueológico de Segóbriga».
Prieto ha preguntado a los responsables de la Junta, “por qué están callados y no explican lo que ha ocurrido en Almonacid”, y también ha denunciado la especial responsabilidad del alcalde del municipio y actual presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana, “quien cuando ayer en el pleno se le pedía explicaciones adoptaba una actitud chulesca y mafiosa, eludiendo las preguntas sobre qué estaba pasando en su pueblo. Él es quien, en teoría, debe de defender los intereses de la provincia y cuidar de nuestros municipios y vecinos. Lo único que hace es esconder la cabeza e intentar burlarse de la opinión pública ocultando una realidad que el sábado, desgraciadamente, fue visible en toda la comarca a modo de gran nube negra”, apuntaba.
Por su parte María Roldán insistía en preguntarse qué oculta la Junta y el alcalde de Almonacid relacionado con el la planta de reciclaje, “desde el Ayuntamiento de Horcajo de Santiago pedimos el expediente de esta instalación en febrero y aún no nos han contestado” y ha matizado su actividad, “se intenta vender que es una planta de residuos no peligrosos pero los datos que hemos podido investigar al respecto son claros, de alrededor de 300.000 toneladas al año que se plantean entran en la planta unos 67.000 sí que pasarían por ese tratamiento pero el resto 232.000 más o menos una quinta parte se vierten en una balsa y se tapan con tierra. Aquí termina el ciclo”, ha explicado. “Es lógica mi preocupación por la cercanía a la planta de los pozos de captación de agua que tiene mi municipio. Bebemos de esa agua” ha recalcado por lo que ha focalizado su crítica en el alcalde y presidente de la Diputación, Chana, “como la persona que tiene que informar de todo lo ocurrido ya que él, entre otras cuestiones, fue el encargado de tramitar la licencia de esta planta de reciclaje”. La diputada regional ha relatado cómo el sábado acudía a las inmediaciones del incendio, “se producían explosiones brutales”, ha señalado, “dudo mucho que el humo ocasionado fuera beneficioso para nuestra salud. Y ahora lo verdaderamente preocupante son las filtraciones que se puedan producir a las aguas y al suelo y, por supuesto, la calidad del aire”, ha insistido.
Para concluir, María Roldán ha anunciado que, “seguiremos insistiendo y vigilando esta planta de reciclaje. Lamentablemente esta desgracia nos ha puesto sobre aviso y confirmado su peligrosidad y que entre los diferentes dirigentes de la Junta y de la Diputación nadie da la cara y, mucho menos, se responsabiliza de lo ocurrido”.