El alcalde de La Alberca de Záncara, Francisco Quilez, ha dirigido una carta al subdelegado del Gobierno en Cuenca, Juan Rodríguez Cantos, en la que le pide que “se adopten las medidas necesarias en la localidad para que, por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, se garantice en el municipio el correcto funcionamiento de todos los servicios y el buen desarrollo de la campaña de recogida de ajos”. El primer edil ha trasladado al representante del Ejecutivo de España en la provincia la «preocupación» que tanto él como sus vecinos tienen especialmente este año, “en el que hay que cumplir con medidas muy estrictas para evitar enfermar por el Coronavirus”, señala Quilez. El alcalde apunta que, «debido principalmente a las limitaciones de movilidad que ha impuesto el Gobierno Central, la afluencia de trabajadores temporeros será menor que otros años, lo que no significa que se necesite menos seguridad, sino incluso más, ya que está en juego la salud tanto de quienes vivimos aquí como de aquellas personas que vengan a colaborar en la campaña agrícola”, apunta.
En su misiva, Francisco Quilez explica que su Ayuntamiento “no dispone de personal adecuado para realizar la labor de control y de seguimiento del personal que llegue al pueblo para trabajar”. En campañas anteriores, apunta el alcalde, «se ha reforzado desde el Consistorio, en la medida en la que se ha podido, la labor que, principalmente la Guardia Civil, ha llevado a cabo en el pueblo, pero este año es muy complicado que podamos ayudar, por lo que está, aún más si cabe, justificado que desde la Subdelegación se preste especial atención a los temas relacionados con la seguridad”.
“Los alberqueños, como todos los españoles, y por supuesto los trabajadores que se van a desplazar hasta La Mancha conquense a la recogida del ajo, hemos realizado un gran esfuerzo desde marzo para cumplir con lo que el Gobierno nos pedía. Hemos llegado muy lejos para que, ahora, por no contar con efectivos suficientes de seguridad, arriesguemos nuestra salud”, concluía Francisco Quilez.
La recogida de ajo «es la campaña más inminente que comienza en la provincia conquense, más en concreto a la zona de La Mancha, durante finales de mayo y se suele prolongar hasta julio. A la necesidad de unas medidas de seguridad adicionales, que se ponen en práctica cada año, se une, en esta ocasión, la prevención, sobre todo higiénica, que se debe poner en práctica para evitar contagios por COVID-19, de la que ningún trabajo, ni el agrícola, está exento».