El Museo Casa de Oficios, Miguel Lucas de Iranzo, de Fuentelespino de Haro, celebraba este fin de semana dos jornadas de puertas abiertas. Por sus instalaciones han pasado cerca de 200 personas, organizadas a lo largo de un extenso horario de visitas y bajo cita previa. El alcalde de la localidad, Benjamín Prieto, ha sido una de las personas que han cedido parte de los objetos de los que se compone este recurso histórico y turístico, “quiero agradecer, en primer lugar, la ayuda de todos mis vecinos, su generosidad y, por supuesto, la acogida de este proyecto” ha señalado Prieto. El primer edil, y también diputado regional, ha valorado positivamente, “que ya hayamos tenido visitantes de otros pueblos en nuestro museo” y ha invitado a que se siga conociendo, “tanto Fuentelespino como su comarca”. El Museo ya está abierto al público, pero para poder acceder a él hay que concertar cita en el Ayuntamiento. También se ha formado ya un grupo de voluntarios que explican su contenido durante el recorrido.
Este museo surge “como idea para revitalizar un entorno del pueblo en base a dos cuestiones importantes, una la vida de Miguel Lucas de Iranzo, condestable de Castilla con Enrique IV y alcalde de Jaén y de Alcalá la Real y, por otro lado, reflejar los 400 años de historia de Fuentelespino”, señala Prieto. Es precisamente la tradición del pueblo, en toda su extensión, el principal hilo conductor de esta infraestructura, “la agricultura, ganadería, la apicultura, el trabajo del esparto, del hierro, el cuero, oficios milenarios que desgraciadamente van desapareciendo, y también enseres del hogar que las generaciones más jóvenes no conocen”. Más de 200 son los objetos que componen la colección del museo y entre ellos piezas antiguas, de yacimientos romanos, colmenas de madera, ya en desuso, un collar que utilizaban los perros para evitar los ataques de los lobos o una televisión, la primera que llegaba al pueblo en los años 60.
Mención aparte merecen las piezas de mayor tamaño, una trilladora, el carruaje manchego, la típica galera, una tartana o el carro de varas, “son un reclamo más de este museo. Contribuyen a perpetuar nuestro legado, a valorar las tradiciones y también a comprender el sacrificio y el esfuerzo de generaciones y generaciones de hombres y mujeres que vivían en nuestro mundo rural”. El museo también cuenta con contenido audiovisual que reproduce testimonios de vecinos a modo de entrevistas.
“Desde Fuentelespino de Haro queremos abrir, con este museo, una puerta a nuestro entorno, reivindicarnos como destino turístico y mostrar con orgullo, tanto a quienes residimos aquí como a los turistas que quieran viajar hasta aquí, el que ha sido hasta hace poco nuestro modo de vida y cómo seguimos siendo parte activa de nuestro mundo rural. Apostamos por nuestros municipios, por la gente que vive en ellos y nos reivindicamos como una tierra llena de oportunidades pero que necesita que las diferentes administraciones públicas crean en ella y nos ayuden a rentabilizar y ofrecer a nuestros vecinos razones para seguir viviendo en los pueblos, que en ellos puedan desarrollar sus proyectos tanto profesionales como personales”, concluye el alcalde, Benjamín Prieto.