El Gobierno regional ha destacado durante la mañana de este viernes que los planes de conservación y recuperación del lince ibérico en Castilla-La Mancha continúan “avanzando y dándonos buenas noticias, ya que estamos en disposición de adelantar que vamos a contar con un nuevo área para la reintroducción de este felino en peligro de extinción, la de ‘Veguilla y Sierra Jarameña’, en Cuenca, una provincia donde hasta la fecha, no contamos con ejemplares de esta especie”.
Así lo ha anunciado Mercedes Gómez, consejera de Desarrollo Sostenible, durante la celebración en Toledo de la Gala de entrega de los reconocimientos a los integrantes del programa europeo Life Lynxconnect correspondiente a 2024, un Programa de la UE en el que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha participa a través de su Consejería (como coordinadora del proyecto en la región); y con la Consejería de Fomento, como responsable de actuaciones de desfragmentación de hábitat en vías de comunicación para prevenir atropellos.
En este contexto, Gómez ha señalado que se trata de “una magnífica noticia que va a permitir en los próximos meses la incorporación de los primeros fundadores de esta nueva subpoblación en la provincia de Cuenca con la suelta de cinco ejemplares procedentes de centros de cría en cautividad”,
La nueva área de reintroducción ya cuenta con todos los estudios y protocolos correspondientes, y ha sido avalada y aprobada por el Grupo de Trabajo de lince ibérico adscrito al Comité de Flora y Fauna (formado por técnicos de todas las comunidades autónomas con linces, incluidos los de la Consejería, del Estado, y de Portugal).
La Sierra Jarameña está emplazada en la zona de transición entre La Mancha Alta y La Mancha Baja conquenses, en torno a municipios como Puebla de Almenara y Villamayor de Santiago.
Quinta área de reintroducción en Castilla-La Mancha, que sigue batiendo récords de ejemplares
Esta nueva área en Cuenca, que se encuentra en su fase más inicial, se une a las tres que ya se han consolidado y cuentan con presencia estable de este felino amenazado en la región: Montes de Toledo en la provincia de Toledo, y Sierra Morena oriental y Sierra Morena occidental en la provincia de Ciudad Real. Y a la declarada como nueva área de reintroducción el año pasado de Campos de Hellín’, en Albacete.
“En definitiva, unas infraestructuras naturales en la que trabajamos para la consolidación de la especie que nos están dando excelentes resultados, como el récord de población alcanzado este pasado año, con 715 ejemplares censados, el 35 por ciento de los 2.000 que habitan en la Península Ibérica, de ellos cerca de 300 cachorros que representan el 41 por ciento de todos los linces nacidos en la naturaleza durante 2023”, ha afirmado.
“Estos nos números nos permiten afirmar que Castilla-La Mancha está siendo clave en la recuperación del lince ibérico. Y más que lo vamos a ser, ya que les adelanto que, aunque aún estamos inmersos en elaborar el censo de este año 2024, este porcentaje va a ser significativamente superado consolidando la presencia de la especie en la región”, ha afirmado al respecto.
Consolidar poblaciones genéticamente viables y evitar atropellos gracias al Life Lynxconnect
Mercedes Gómez ha puesto en valor los avances logrados en la recuperación del lince ibérico gracias al Life Lynxconnect, un proyecto europeo que cuenta con 21 socios beneficiarios (administraciones ambientales y las cuatro administraciones autonómicas españolas con presencia de la especie Castilla-La Mancha, Murcia, Andalucía y Extremadura, además del vecino Portugal), y un presupuesto que asciende a 18,7 millones de euros para las financiar las diferentes actuaciones que se están realizando hasta el año 2025.
Así, ha señalado que, “desde el inicio del actual proyecto Lynxconnect, a lo largo de los últimos cinco años se ha producido la cría en libertad en el medio natural de más de 2.500 ejemplares, prácticamente 1.000 de ellos en Castilla-La Mancha”.
Ha concluido indicando que, “en estos momentos estamos centrados en lograr una población autosostenible, genéticamente viable, que gracias a la conexión de los núcleos existentes nos permita la consolidación de las poblaciones ya asentadas, a la vez que trabajamos en la disminución de la mortalidad no natural, sobre todo la provocada por los atropellos en vías de comunicación”.