“La mayor satisfacción de estos dos años ha sido la solución al problema de los bomberos”

Primera parte de la entrevista del domingo con Álvaro Martínez Chana, presidente de la Diputación Provincial de Cuenca

Dos años se han cumplido este mes de julio de la proclamación de Álvaro Martínez Chana como presidente de la Diputación Provincial de Cuenca. Dos años marcados, como la ejecutoria de cualquier político, por la pandemia que todavía nos golpea. En el ecuador de este mandato Chana recibe en el palacio provincial a Voces de Cuenca para mantener una extensa charla que publicaremos en dos entregas y en las que analiza la ejecutoria del equipo de gobierno que él encabeza durante estos 24 meses y plantea los retos y proyectos más importantes que la institución provincial va a abordar en el resto de mandato.

¿Qué balance hace de estos dos primeros años de mandato en Diputación?

Un balance positivo, de satisfacción por el trabajo realizado, bien es cierto que el último año y medio ha sido muy complicado, marcado por la pandemia, en el que hemos tenido que volcarnos en atender lo que era urgente y prioritario en materia sanitaria, de servicios sociales y económica, pero eso no ha sido óbice para que siguiéramos trabajando en las líneas que nos marcamos tanto en empleo, como en bomberos, desarrollo empresarial, planta de residuos sólidos, etc… El trabajo ha sido más difícil pero ha sido constante y los resultados están ahí, ya hay compromisos cumplidos de los que nos sentimos muy orgullosos pero también somos muy exigentes y nuestra intención es ir a más y no sólo cumplir con lo que nos comprometimos sino aprovechar otras oportunidades para mejorar nuestros pueblos y la calidad de vida de sus vecinos.

¿Hay algo de lo que se sienta especialmente orgulloso en estos dos años?

En materia de bomberos creo que se ha hecho un gran trabajo con Joaquín González Mena, todo su equipo y todos los que hemos participado de alguna forma en arreglar un servicio que estaba destrozado tanto interna como externamente, porque los tiempos de respuesta, sobre todo en la Serranía y en la Alcarria, eran muy malos y el que hayamos podido alcanzar los acuerdos con el Ayuntamiento de Cuenca y con la Diputación de Albacete, el que estemos ya en marcha con la construcción de los parques y que internamente hayamos sido capaces de llegar a un acuerdo en el convenio laboral y alcanzar la paz social que todos ansiábamos creo que para mí ha sido una de las mayores satisfacciones de estos dos años.

¿Y en la otra cara de la moneda hay algo que echando la vista atrás piensa que podría haber hecho de otra manera o que por las circunstancias le hubiera gustado hacer y no ha podido?

Errores siempre se cometen y sobre todo cuando uno llega de nuevas a una institución. A mí me gusta siempre ver la botella medio llena y de ahí que hayamos corregido a mitad de legislatura ciertos aspectos. Hay áreas como el de la asistencia a las entidades locales que sí que me hubiera gustado que hubiéramos avanzado más y nuestra intención es dar un impulso, y también en el área de turismo, que es uno de los motores económicos de esta provincia pero que también se ha visto muy condicionada por todo lo que tiene que ver con la pandemia. Obviamente nuestra intención que una vez que se recupere esa cierta normalidad podamos darle un impulso y siempre mirando con optimismo y con mucha fuerza de cara a lo que resta de legislatura.

En política hay que tomar decisiones, el inmovilismo es muy malo, y la gente tiene que estar siempre activa y en tensión”

Coincidiendo con este ecuador de mandato ha habido unas modificaciones dentro del equipo de gobierno. ¿Cuáles son las razones que le han llevado a realizar estos cambios?

El análisis interno y externo, ver la forma de trabajar, porque somos una corporación nueva en la que incluso algunos no nos conocíamos, que te ayuda a diseñar los cambios, y luego obviamente viendo las necesidades tanto de la casa como con respecto a nuestros ciudadanos y ayuntamientos. Es una remodelación que viene también condicionada por cuestiones personales, como es el caso de Joaquín González Mena, que ha decidido jubilarse, y que va enfocada sobre todo a mejorar lo que estaba funcionando pero que siempre es susceptible de esa mejora. Siempre digo que en política hay que tomar decisiones, el inmovilismo es muy malo, y la gente tiene que estar siempre activa y en tensión. 

Un amigo mío siempre dice que cuando se tiene el poder es para ejercerlo.

Correcto, el esconderse y el quedarse quieto, y creo que podía ser este el caso, no es bueno. Tenemos la percepción, y así nos está llegando por muchos ámbitos, de que la Diputación está funcionando bien, que estamos atendiendo bien a los ayuntamientos, hemos puesto en marcha planes de inversión muy potentes, se ha apostado por un proyecto importantísimo como es el parque científico y tecnológico, hemos resuelto entuertos anteriores, y uno podría conformarse y continuar así pero somos ambiciosos y hacemos esta apuesta para mejorar, el tiempo dará y quitará razones pero, como digo, a mí gusta avanzar y para eso hemos hecho estos cambios.

Después de estos cambios da la impresión de tanto Nuria Illana como Carlos Muelas ganan protagonismo en el equipo de gobierno.

No se trata de tener mayor protagonismo ni de premiar o castigar, al contrario, se trata de mejorar y conociendo los perfiles de ambos en estos dos años de trabajo cada uno de los cambios va muy enfocado con el perfil humano y profesional que tienen. Carlos es una persona que posee una templanza que requiere el momento y que se necesita en servicios tan delicados como personal o prevención y extinción de incendios. Nuria es una conocedora de la casa como no hay otra y obviamente en un servicio como el de atención técnica a municipios y en otro que tiene mucho que ver con él como es el organismo autónomo de recaudación ha demostrado que tiene mucha fuerza para poder aportar el cambio que requieren esos servicios. Pero más allá de eso todo el mundo tiene su propio protagonismo, todos son importantes y, por ejemplo, Miguel Ángel Valero asume un área de patrimonio que se va a crear exclusiva para todo el patrimonio de la provincia, tanto interno de la casa como externo, con el reto de lanzar nuestro sector turístico, que para nosotros es clave y por el que vamos a apostar.

El trabajo que se desarrollaba en el Patronato va a seguir igual o más potenciado aún pero de cara al interior de la casa se abre un proceso ahora que nos va a llevar meses pero cuyo fin será la extinción del Patronato”

Otra de las noticias importantes de estos últimos días es el anuncio de la disolución del Patronato de Desarrollo Provincial. ¿Cuáles son las razones por las que se va disolver el Patronato y cuándo se va a producir esa disolución?

El miércoles firmé la providencia por la que se inicia el expediente de disolución y la razón es, por decirlo así, burocrática. Hace cuatro años en una inspección rutinaria del Tribunal de Cuentas se detectó una anomalía que era que los trabajadores del Patronato están adscritos a la Diputación y sin embargo desarrollan su trabajo en el Patronato. Esto había que corregirlo y cabían dos opciones, que los trabajadores se adscribieran al Patronato o que siguieran adscritos a Diputación pero sin trabajar para otro C.I.F. Hablamos y negociamos con la representación sindical y los trabajadores han estimado que lo más oportuno era integrar dentro de la Diputación esos trabajos que se estaban haciendo en el Patronato. Esto de cara al exterior no afecta para nada y el trabajo que se desarrollaba en el Patronato va a seguir igual o más potenciado aún pero de cara al interior de la casa se abre un proceso ahora que nos va a llevar meses pero cuyo fin será la extinción del Patronato.

¿Para cuándo está prevista esa extinción?

Nuestra idea es terminarlo con el año natural y las competencias que tiene ahora el Patronato se integrarán en los distintos servicios de Diputación. Todo lo que tiene que ver con ferias y turismo pasará directamente a depender de Miguel Ángel Valero y el área de emprendimiento y reto demográfico va a continuar con ello Elena Carrasco. Es, como digo, un movimiento interno obligado por la comunicación del Tribunal de Cuentas que esperamos concluir a final de año sobre todo por el tema presupuestario.

Aunque parezca mentira llevamos varias preguntas ya y no hemos hablado de Covid, aunque es evidente que ahora mismo estamos inmersos en una quinta ola con los contagios disparados pero con unos datos de presión hospitalaria y de fallecidos muchísimo menores que los de olas anteriores. Hay algunas comunidades autónomas y algunos ayuntamientos que plantean que hay que endurecer las medidas restrictivas. ¿Cómo cree usted que hay que actuar?

Es difícil de decir, ya ha sido muy difícil tomar decisiones durante todos estos meses, sobre todo los responsables sanitarios. Yo apelo a la cautela y a la precaución que debemos mantener y teniendo en cuenta los datos de vacunación hay datos que nos hacen ser muy cautos. Este año y medio ha sido de aprendizaje para la ciudadanía y lo que no podemos hacer tampoco es pasar de cero a cien, hay que ir poco a poco. Ayer visitaba a la primera remesa de niños que han estado en el albergue de la Fuente de las Tablas y es una delicia ver cómo se han comportado los niños durante estos cinco días, cómo han aprendido a convivir con la mascarilla y con todas las medidas y creo que debemos en este caso mirarnos en el espejo de los niños, cómo ellos siguen siendo muy responsables y respetan las normas escrupulosamente.

Este es el momento de determinar la línea entre la recuperación económica y el control de la pandemia, porque tampoco podemos entrar en grandes restricciones que nos paralicen la economía un año más.

Creo que hemos aprendido ya y es verdad que hay que relanzar la economía porque al final esto se puede transformar en un problema social. Es importante aprender a convivir con el virus, con precauciones pero con cierta normalidad, atendiendo a criterios sanitarios, pero recuperando tanto nuestra economía como el contacto social, aunque siempre con la precaución necesaria.

Hablábamos hace unos meses de que los presupuestos de 2021 eran muy inversores. Pasados seis meses desde entonces cuáles han sido las principales inversiones que ha hecho la Diputación de Cuenca.

Hemos avanzado en el plan de instalaciones deportivas, en el que se están ejecutando obras por más de 7 millones de euros en prácticamente todos los pueblos de la provincia, y el que está fuera es porque no lo ha querido solicitar, tenemos o bien ejecutando o bien en licitación más de 8 millones de euros en obras de patrimonio en los principales yacimientos, como hemos visto con la licitación de 1 millón de euros para el Balneum de Noheda, en materia de caminos han sido 4 los millones que hemos conveniado con la Junta de Comunidades para el convenio de las zonas de monte, o próximamente la firma del convenio de consultorios locales que llegará a muchos pueblos también. Aprobamos hace apenas dos meses la modificación de crédito con 4 millones para caminos en toda la provincia y otros 4 millones para mejoras urbanas, por tanto estamos hablando de cifras muy importantes a las que hay unir el plan de obras y servicios, que será bienal con más de 16 millones de euros entre las dos anualidades. Y nuestra intención es seguir así, de hecho algún constructor medio en broma medio en serio nos decía que íbamos demasiado rápido, aunque también es verdad que el problema de la construcción es que nos estamos quedando sin constructores en la provincia, pero ya digo que nos decía en tono jocoso que había tanta inversión tanto privada como pública que no estaban llegando a todas las obras. Eso nos refuerza para seguir en esa línea porque si hay una provincia donde el impulso de lo público es clave esa es Cuenca.