La Asociación Unificada de Guardias Civiles de Cuenca ha denunciado «que no se refuerza las unidades de seguridad ciudadana en la provincia». A través de una nota de prensa, indican que «resulta descorazonador observar cómo se marchan más agentes dedicados a la seguridad ciudadana de los que se incorporan a nuestra provincia, empeorando con ello la situación, la cual ya era deficitaria en la provincia de Cuenca».
A su juicio «la mayoría de los cuarteles de la provincia continuarán cerrados, con menor personal operativo en los pueblos, carreteras y en definitiva, padeciendo un sistema estructural y organizativo del Instituto Armado más propio del siglo XIX donde lo único que perdura y avanza es la burocracia de un sistema “de gestión” en vez de operativo y policial. El ciudadano no tiene porqué soportar ésas deficiencias y escasez de plantilla y de seguridad, de lo que debe de ser un servicio público de seguridad moderno».
Desde AUGC Cuenca no entienden «cómo instituciones y organizaciones políticas y sociales de la provincia no se alarman por ésta situación. En la actualidad en la provincia de Cuenca, de un catálogo de algo más de 730 agentes resulta que operativos en seguridad ciudadana no llega a cubrirse ni el ochenta por cierto».
Desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles consideran «la necesidad de ampliar en un mínimo de 80 agentes los necesarios para cubrir las necesidades de seguridad ciudadana en nuestra provincia además de mejorar sus condiciones de trabajo ya que ni si quiera disponen de una cadencia fija en sus turnos de trabajo perjudicando notablemente su conciliación familiar y laboral».
Por otro lado ven «que los encargados de la vigilancia y regulación del tráfico en nuestras carreteras en la provincia de Cuenca, a día de hoy tienen un déficit de más de 40 agentes. Estos agentes de la agrupación de tráfico de la guardia civil llevan tiempo abandonando la especialidad por las malas condiciones laborales, tampoco disponen cadencias fijas en sus turnos de trabajo, incumpliéndose los descansos diarios, etc».
«A pesar de los esfuerzos de los guardias civiles para intentar paliar las carencias de personal con su profesionalidad y compromiso, lo cierto es que los datos estadísticos demuestran que cuanto menores son las plantillas policiales mayores son los índices de criminalidad», sentencian.