La portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, ha defendido este martes que todos los profesionales sanitarios del Área de Salud de Cuenca recibirán la segunda dosis de la vacuna contra el coronavirus dentro del rango «que establecen los laboratorios, entre 21 y 28 días después de la segunda dosis», por lo que ha rechazado que «realmente se pueda hablar de retraso» por el cambio del calendario de las citas para la segundas inyecciones. «Van a quedar perfectamente protegidos, cada uno en función de sus características y del comportamiento, claro, pero sin que esta circunstancia influya», ha apostillado.
Fernández respondía así en rueda de prensa a una pregunta enviada por Voces de Cuenca sobre si la situación que viven los sanitarios conquenses era aislada o respondía a una situación generalizada en Castilla-La Mancha, una cuestión que no ha precisado. Este lunes, los profesionales del Hospital Virgen de la Luz y de los centros de salud y consultorios recibieron un anuncio interno en el que se les avisaba que la falta de disponibilidad de dosis afectaría al calendario de vacunación previsto y que en breve se comunicarían nuevas fechas. Ello suponía en la práctica generalizada la demora sobre la planificación prevista, que fijaba en 21 días después de la primera dosis la administración de la segunda. La Junta de Personal han revelado que el compromiso de la Gerencia del Área Integrada es que el 5 de febrero «o como tarde el 8» se complete el ciclo de vacunaciones en este grupo.
Desde el Sescam y la propia Gerencia atribuían a este periódico la modificación a la necesidad de contar con las dosis necesarias y señalaban que esta decisión del Comité Asesor de la Estrategia de Vacunación venía avalada «por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios del Ministerio de Sanidad que considera que la segunda dosis de la vacuna se puede administrar entre los días 21 y 28 sin que disminuya su grado de eficacia».
Otra agencia de medicamentos, en este caso la europea, incluye desde el pasado viernes un aviso en el prospecto Pfizer resaltando «que el 93,1% de los participantes en el ensayo clínico recibieron la segunda dosis entre 19 y 23 días después de la primera dosis». La entidad reguladora continental enfatiza que «actualmente no hay datos clínicos sobre la eficacia de la vacuna cuando se administra más allá de los intervalos utilizados en el ensayo clínico», que van del día 19º al 42º tras la primera vacunación.
Falta de abastecimiento
Fernández ha insistido en varias ocasiones a lo largo de la rueda de prensa que el problema con las vacunas en Castilla-La Mancha radica en estos momentos únicamente en la falta de abastecimiento «por los problemas de posibles incumplimientos de las farmacéuticas del contrato de la Unión Europea» ya que, ha aseverado, «el sistema sanitario regional tiene todos los recursos para administrar sin problemas las dosis que reciba» asegurando así los ritmos marcados. Prueba de ello, ha ejemplificado, «es que hemos dispensado el 100% de las recibidas».
En esa línea, la portavoz gubernamental ha aclarado «que por supuesto que apoyamos al Gobierno de España y al de la Unión Europea, regido por cierto por democristianos miembros del Partido Popular Europeo» en este asunto.
Además, ha cargado contra las críticas del Partido Popular de Castilla-La Mancha por la organización del sistema de vacunación y ha manifestado que «por lo que dice, podríamos pensar que si él fuera presidente regional, Paco Núñez sería el primero en vacunarse, pero ya les digo yo que Emiliano García-Page solamente se vacunará cuando le corresponda, al igual que los miembros del Gobierno».
La consejera ha eludido concretar si en este mes de febrero podrá iniciarse ya la vacunación de los mayores de 80 años, como ha anunciado Galicia. «En nuestro caso y en cualquier comunidad autónoma o territorio europeo, todo dependerá del ritmo de abastecimiento de los laboratorios».