Los populares denuncian la «rápida promoción» de la exvicepresidenta Nuria Illana y la contratación de familiares de dirigentes del PSOE.
El Grupo Popular en la Diputación de Cuenca ha denunciado la creación de nuevas jefaturas de servicio que, según afirman, han sido diseñadas «a medida» para cargos vinculados al Partido Socialista. En concreto, critican la designación de la exvicepresidenta de la institución y alcaldesa de Sotos, Nuria Illana, y del concejal socialista en el Ayuntamiento de Cuenca, Héctor Serrano, para ocupar dos nuevas jefaturas en Fondos Europeos y Patrimonio, respectivamente.
La presidenta del Grupo Popular en la Diputación, Clara Plaza, ha destacado el caso de Illana, quien en apenas seis meses ha pasado del grupo C2 al A1 con un nivel 28, lo que implica un salario cercano a los 5.000 euros mensuales. «Parece que su dimisión como vicepresidenta hace un año, alegando motivos personales, le ha resultado bastante rentable», ha ironizado Plaza.
Desde el PP también han cuestionado la «celeridad» con la que se crean y ocupan estos puestos de dirección, en contraste con la «falta de urgencia» para cubrir plazas en áreas esenciales como la residencia de mayores o la administración auxiliar.
Acusaciones de enchufismo en la Diputación
Los populares han calificado esta práctica de «injusta y discriminatoria» y han señalado que, además de estas jefaturas, en los últimos meses se ha incorporado a la Diputación el marido de Illana y un familiar de una asesora del presidente provincial, Álvaro Martínez Chana. «Desde que el PSOE gobierna la Diputación, el enchufismo se ha convertido en algo habitual, y en los últimos meses se ha acentuado», ha afirmado Plaza.
En este sentido, el PP ha recordado un episodio ocurrido hace dos años, cuando un ujier conserje, hijo de un militante y cargo socialista, obtuvo un 9,55 en un examen de la Diputación, mientras que el resto de opositores, más de 70, no superaron el 7.
Plaza ha criticado que las diputaciones provinciales «deberían estar enfocadas en mejorar la vida de los ciudadanos y en apoyar a los municipios, en lugar de destinar fondos públicos a la creación de puestos de trabajo bien remunerados para cargos socialistas».
