La línea de ferrocarril convencional que une Madrid con Valencia a través de Cuenca no forma parte de la Red Transeuropea de Transporte, por lo que la decisión de modernizar o no este corredor ferroviario corresponde a las autoridades competentes de España y no a las continentales. Es la tesis principal de la respuesta que la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo ha ofrecido a Fernando Mínguez, quien en nombre de las asociaciones Cuenca Ahora y España vaciada había planteado una solicitud a este órgano sobre el mantenimiento, la mejora y la modernización de la línea en el marco del Plan de Modernización.
«El desarrollo de los ferrocarriles es una de las prioridades de la política europea de transportes. El aumento de la proporción de mercancías y pasajeros transportados por ese modo de transporte contribuirá a los objetivos del Pacto Verde Europeo y de la Estrategia de Movilidad Inteligente y Sostenible. El ferrocarril es verde, sostenible, emite menos dióxido de carbono (CO2) que un viaje equivalente por carretera o aire. Representa solo el 0,4 % de las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes del transporte de la UE, mientras que el transporte de la UE representa el 25 % del total de las emisiones de la UE. El desarrollo de la infraestructura ferroviaria es uno de los objetivos fundamentales de la política de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T), en particular la propuesta de la Comisión de revisar el Reglamento RTE-T adoptada el 14 de diciembre de 2021», comienza diciendo la Comisión.
No obstante, el Europarlamento matiza a continuación que «si bien la línea de alta velocidad Madrid-Cuenca-Valencia forma parte de la red RTE-T, el ferrocarril convencional que une estas ciudades no pertenece a la red RTE-T. Por lo tanto, la decisión de modernizar (o no) esta línea ferroviaria corresponde a las autoridades competentes de España». En este contexto, recuerda que «el artículo 172 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) dispone que los proyectos de interés común relacionados con el territorio de un Estado miembro requerirán la aprobación del Estado miembro de que se trate».
Por ello indica que, aunque la Unión Europea puede contribuir a la financiación de proyectos de transporte de infraestructuras, en particular a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, el Mecanismo «Conectar Europa» y el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, «la decisión sobre la viabilidad, sostenibilidad y explotación de una conexión ferroviaria corresponde a las autoridades nacionales competentes».
Antecedentes
El peticionario había pedido a la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo que solicitara al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de España y al Gobierno de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha que tomen medidas para mantener, mejorar y modernizar la línea ferroviaria Madrid-Cuenca-Valencia, que, según él, se está abandonando gradualmente, y que utilice algunos de los fondos del Plan Europeo de Recuperación para este ferrocarril.
Sostenía en su texto el representante de Cuenca Ahora que su demanda está en consonancia con los objetivos del Año Europeo del Ferrocarril, que se celebra en 2021, en términos de fomentar y apoyar un aumento de la cuota del ferrocarril en el transporte de pasajeros y mercancías. Afirmaba asimismo que «la promoción del ferrocarril como medio de transporte sostenible, innovador, seguro y asequible se vincula con su papel como factor clave de neutralidad climática, al mismo tiempo que fomenta la cohesión socioeconómica y territorial y contribuye a la integración del mercado interior europeo». También que «es socialmente eficiente, ya que satisface las necesidades básicas de viaje de quienes viven en asentamientos aislados, al tiempo que mejora sus condiciones de vida, al mismo tiempo que ayuda a desarrollar el turismo en esas áreas abordando el desafío demográfico y fomentando el desarrollo sostenible».
La solicitud fue admitida a trámite el 20 de diciembre del año pasado y la respuesta de la Comisión está fechada el 29 de marzo, aunque ha sido ahora cuando se ha dado a conocer.