Las ayudas de la Unión Europea para combatir la despoblación en las provincias de Soria, Cuenca y Teruel han sido una reivindicación histórica que no acababa de materializarse. Las organizaciones empresariales de los tres territorios han encabezado este reclamación como mecanismo para aportar justicia y combatir las dificultades que arrastran ante la continua pérdida de población.
Tras una reiterada demanda que se ha prolongado durante años, el Gobierno de España anunciaba por fin el pasado día 13 el ‘despliegue’ de las ayudas de funcionamiento para las empresas en Soria, Teruel y Cuenca destinadas a consolidar el tejido productivo y fijar población. La medida contempla una reducción del 5% en la cotización por contingencias comunes de la empresa en todos los contratos indefinidos existentes en el ámbito provincial, del 15% en los nuevos contratos indefinidos y del 20% en nuevos contratos indefinidos en empresas situadas en municipios de hasta 1.000 habitantes.
Según las fuentes consultadas por este periódico, en Noruega se aplica una reducción de 10 puntos sobre las contingencias comunes. Es decir, del 23,6% que suponen las contingencias comunes dentro de las aportaciones a la Seguridad Social de una empresa, pagaría un 13,6% frente al 23,6%. La reducción es cerca del 45%. En el caso de las ayudas para Cuenca, Soria y Teruel sobre el 20% se están rebajando 4,72 puntos en el mejor de los casos, lo que supone menos del 50%. Y en el peor de los casos del 5% la reducción es de 1,18 puntos, cerca de un 10% de Noruega.
Quienes consideran que las ayudas finalmente aprobadas por el Gobierno español se quedan cortas piden aplicar las reducciones en las cotizaciones con puntos porcentuales, en lugar de porcentajes y exigen que se cumpla la disposición adicional 123 de los Presupuestos vigentes que establece buscar “el máximo aprovechamiento” de las ayudas. De hecho, la Unión Europea contempla, como máximo, una rebaja hasta el 20% de los costes laborales de las empresas, no sólo de las contingencias comunes. Teruel Existe ya ha indicado que las ayudas anunciadas por el Gobierno son «claramente insuficiente, por lo que, si no hay modificaciones» no apoyarán los presupuestos para 2023”.
Desde Soria Ya han elaborado un vídeo clculando el impacto que los porcentajes planteados por el Gobierno tendrían sobre casos reales de la economía soriana. Así, se desprende que el ahorro para una empresa que se acoja al porcentaje mínimo del 5% sería de 230,51 euros frente a los 922,05 que tendría el máximo del 20%. Frente a estas cifras el procurador de esta formación política, Ángel Ceña, sitúa los 5.153 euros a los que se podría llegar con el máximo permitido por la UE.
El caso noruego, aumento de población del 5% en la última década
La coordinadora de la Red SSPA (Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa), Sara Bianchi, ha indicado desde Noruega que «las ayudas de funcionamiento a empresas con reducción de los costes laborales de las empresas es un instrumento que se aplican por el gobierno noruego desde 1975, cuyo objetivo es incrementar el empleo en las regiones socioeconómicamente más vulnerables, mejorando su competitividad y aumentando su cuota de mercado. Este aumento de la competitividad se traduce en la creación de más empleo. Los resultados de esta política se pueden ver reflejados en el crecimiento de la población de más de un 5% en las regiones consideradas muy escasamente pobladas durante la última década».
Estas mismas fuentes han apuntado que «las ayudas han tenido efectos multiplicadores, directos e indirectos, en el conjunto de las economías de regiones fiscales noruegas, y en concreto sobre los efectos sobre el valor añadido de la producción, sobre el número de actividades económicas, sobre la renta y el consumo y sobre la recaudación de tributos».
De hecho en todo el tiempo que Noruega lleva aplicando las ayudas de funcionamiento, «la fórmula ha evolucionado hasta la existente en estos momentos. No sólo es la más beneficiosa para las empresas y para hacer el territorio más atractivo para las inversiones foráneas, sino que en cuanto a procedimientos es la más rápida, operativa y ágil, además de permitir un mayor control de la misma por parte de las autoridades pertinentes».
Despoblación en la provincia de Cuenca
Entre 2001 y 2020, la provincia de Cuenca ha perdido 5.387 habitantes, pasando de 201.526 a 196.139 habitantes. En total, en la última década, Cuenca ha perdido un 10,5 % de su población. Cuenca cuenta con 238 municipios: solo 7 superan los 5.000 habitantes. Tiene 231 municipios en zonas rurales (el 97,1 %).
En la última década, han perdido población el 96,2 % de los municipios. La densidad de población en Cuenca es de 11,45 habitantes por km², a pesar de que la densidad media de España es de 93,1 hab/km². Hay 201 municipios (84,4 %) con una densidad inferior a 12,5 hab/km², el umbral de riesgo demográfico para la UE.