Antes de la supresión de trenes convencionales, la línea de Cuenca superaba en ocupación a las de Sigüenza y Talavera. Así lo indica la Plataforma en Defensa del Ferrocarril de Cuenca y Pueblos con el tren tras un encuentro que han mantenido con alcaldes afectados por «el posible desmantelamiento de la línea con representantes de CEOE-CEPYME». Desde los portavoces del tren se indica a la patronal que «una vez analizado su Plan de Movilidad y las múltiples notas de prensa generadas por los empresarios las últimas semanas, este plan carece de rigor y contiene inexactitudes técnicas y de evaluación de oportunidades que pueden ser lesivas para Cuenca».
La Plataforma y Pueblos con el Tren lamentan estar «cansadas de invenciones difundidas por quienes carecen de conocimientos básicos sobre las infraestructuras y la movilidad, pero pretenden disponer del futuro de Cuenca. La línea Aranjuez-Cuenca-Utiel no tiene limitaciones de carga por eje, ni limitaciones por las rampas o pendientes en los trenes de mercancías, numerosos tramos están autorizados para circular a velocidades de 140 km/h y las estaciones de todos los pueblos están más cerca que la parada del AVE en Cuenca que, como todo el mundo sabe, se sitúa a varios kilómetros de la capital». A juicio de las entidades «los problemas podían corregirse con facilidad si ejecutaran las partidas consignadas en los Presupuestos Generales del Estado para el mantenimiento del ferrocarril de la provincia. Una deuda histórica que, a juicio de Pueblos con el Tren y la Plataforma del Ferrocarril, debe ser inmediatamente satisfecha a Cuenca».
«Que Cuenca dispone de una posición estratégica es suficientemente conocido. Excepto por quien esté conducido por una perspectiva cortoplacista y desee sacrificar una infraestructura que nos conecta con la capital de España y el primer puerto de España», sentencian. En este sentido, apuntan que «el estudio de CPS Ingenieros para Cámara de Comercio de Valencia determina una capacidad de carga neta de 7,1431 millones de toneladas al año por sentido, vía Cuenca y, además, significa que ‘es perfectamente viable compatibilizar el tráfico actual (cercanías y regionales) con un tráfico de mercancías de alta capacidad de transporte'». El estudio valenciano concluye “la explotación de la línea es posible con un nivel de inversión razonable”.
«Sobre el inexacto número de viajeros de la línea, sin que se compare con otras de la España Vaciada, en el estudio de INECO sobre el que se decidió suprimir trenes en 2013, la relación Madrid-Cuenca-Valencia registraba más viajeros por circulación (88) y mayor ocupación de plazas por viajeros kilómetro (17,9%), que los trenes entre Guadalajara-Sigüenza, Ciudad Real-Alcázar, Madrid-Talavera y Puertollano-Extremadura. Sin embargo, a diferencia de otros territorios de Castilla-La Mancha, Cuenca vio reducido el número de trenes semanales de 80 a 42», aseveran en su comunicado.
Además, desde quienes conocen y creen en el futuro del ferrocarril, como se propugna desde Europa, se han aclarado nociones básicas de movilidad en los servicios regionales de tren. «En primer lugar, respecto a la provincia de Cuenca, hay suficientes personas que viajan en ferrocarril para atención médica, estudios y compras a la capital, que verían restringida su movilidad. Esto es debido a que, en nuestra línea, el ferrocarril mantiene prestaciones similares en precio, tiempo y frecuencia a la carretera, con el añadido de la comodidad del tren. En segundo término, el 31% de los viajes de la línea tuvieron origen destino el entorno de las áreas metropolitanas de Valencia o Madrid. Es decir, hay un importante número de pasajeros de otras comunidades que dejarían de visitar, estudiar e ingresar dinero en Cuenca por no disponer de una alternativa de viaje».
Asimismo, creen que sería deseable que CEOE «informara a los ciudadanos de Cuenca sobre el ahorro que significaría a ADIF cerrar la línea. Dinero que, según los empresarios, sería entregado por ADIF a Renfe para subvencionar servicios Avant». Al respecto, «esta entrega queda dentro del terreno de la utopía y, además, hay que advertir que esta posibilidad imposibilitaría o penalizaría significativamente los tiempos de viaje desde las localidades intermedias a Valencia y Madrid. Ya que no lo hacen, desde Pueblos con el Tren y la Plataforma en del Ferrocarril Público, conforme con el último dato disponible, estos ingresos por circulación de trenes y reserva de capacidad ascendieron a 366.507,08 euros anuales. Una cifra ridícula si se quiere disponer de más autobuses y más trenes de alta velocidad».
Por último valoran de forma muy positiva un aspecto de este encuentro: «Desde CEOE se nos ha transmitido que distintas instituciones –Ayuntamiento de Cuenca, Diputación Provincial, Junta de Comunidades, Ministerio de Fomento…- se muestran dispuestos a escuchar su propuesta. Por eso, recordamos a estas instancias que estamos a la espera que escuchen nuestros argumentos».