Este fin de semana trascendía la noticia de que Huete, cabeza de La Alcarria conquense, era una de las localidades españolas señaladas como candidatas para albergar una gran base logística militar; el proyecto más ambicioso de las Fuerzas Armadas para llevar sus instalaciones y efectivos a la denominada España Vaciada.
Una iniciativa que tendría un impacto extraordinario en la economía provincial si se hiciera realidad (generaría entre 1.400 y 1.600 empleos) y cuyos elementos clave se desgranan y explican en las siguientes preguntas y respuestas.
¿Qué es la base logística del Ejército para la que se postula Huete?
Es el proyecto central del denominado Plan COLCE del Ministerio de Defensa, que pretende unificar doce centros logísticos, laboratorios y parques de mantenimiento repartidos actualmente por la geografía española en tres de nueva creación: el centro de abastecimiento (Cabet), el de mantenimiento de sistemas de armas terrestres (Cemsatet) y el de mantenimiento de aeronoves (Cemaet). Los dos primeros estarían juntos y constituirían la nueva base logística del Ejército de Tierra, cuyo emplazamiento todavía no ha decidido la Secretaría de Estado de Defensa. El tercero se ubicaría en Colmenar Viejo (Madrid).
¿Dónde están ahora las instalaciones que se unificarían en esa base?
Los centros que se trasladarían a esta nueva base son los que se encuadran bajo la denominación de órganos logísticos centrales (OLC) y los de funciones similares. Están en su mayoría en la Comunidad de Madrid, pero también hay en las provincias de Segovia, Córdoba, Guadalajara y Valladolid.
¿Por qué quiere crear el Ministerio de Defensa esta base?
El principal objetivo es optimizar recursos y aprovechar las sinergias entre los diferentes departamentos, además de modernizar los procedimientos y las instalaciones. Si un vehículo, por ejemplo, necesita de varias actuaciones es mucho más operativo y económico que las reciba en un único lugar en vez de tener que ir trasladándose de un centro a otro que puede estar separado a varios centenares de distancia. También se rebajarían los costes de mantenimiento y el gasto ordinario o los relacionados con el almacenaje.
¿Cómo sería?
Todavía está en fase de estudio, por lo que no se puede concretar cómo sería este macrocentro. Los planes del Ministerio de Defensa que han trascendido -y las declaraciones de responsables militares al respecto- lo dibujan como un espacio de entre 40 y 90 hectáreas que contaría con centro de mantenimiento de servicios terrestres y otros de abastecimiento, calibración, mantenimiento y software. Además, habría un área de recepción de materiales, una pista de pruebas y hasta una residencia para trabajadores como comedor y guardería. Estaría destinado a funciones el mantenimiento de vehículos, armamento y sistemas de comunicación y operaciones, entre otras.
¿Cuántos puestos de trabajo generaría? ¿De qué perfiles profesionales?
Las estimaciones publicadas en varios medios citando fuentes del Ejército apuntan que el nuevo centro emplearía directamente a alrededor de 1.400-1.600 personas, en su mayoría militares aunque también civiles. Los perfiles serían diversos: mecánicos, electricistas, ingenieros de varias ramas, profesionales tecnológicos, personal de limpieza, etc… Los cálculos del Ayuntamiento de Huete cifran en 5.000 el número de puestos de trabajo indirectos, tres veces la población censada actualmente en todo el municipio.
¿Y cuándo comenzaría a funcionar?
El proyecto data de la primera legislatura del gobierno de Mariano Rajoy, que lo dejó en suspenso en 2016 por cuestiones presupuestarias. El nuevo ejecutivo socialista-podemista relanzó la idea en 2018 e incluyó el Plan Colce en su plan de infraestructuras 2019-24. Sin embargo, en junio de este 2020, la ministra de Defensa, Margarita Robles, afirmó en respuesta a una pregunta parlamentaria de Vox que la gran base logística es «un proyecto a largo plazo» todavía en estudio para el que no se dispone de financiación y que, por lo tanto, sigue en fase de estudio.
¿Cuánto costaría?
Las cifras difundidas apuntan a una inversión superior a los 300 millones de euros, cantidad para la que ahora mismo no hay presupuesto reservado. El gran problema para acometerlo es la liquidez. A largo plazo se entiende que se recuperaría el dinero gastado con creces por el ahorro operativo que supondría. Otros análisis razonan que a los empleados les cundiría mucho más el sueldo en una zona de la España Vacía que en Madrid, donde el coste de la vida es mucho más elevado.
También se ha apuntado como vía de financiación la venta de las instalaciones en las que ahora se ubican los centros que se unificarían para su traslado. El problema es que es un círculo vicioso: estas operaciones inmobiliarias no se podrían completar hasta que no se dispusiera de un nuevo destino para servicios y trabajadores. No se construye la nueva base porque no hay dinero procedente de la venta de las antiguas y no se ejecuta la venta que daría ese dinero porque no está todavía listo el nuevo centro.
¿Qué localidades se disputan la gran base logística?
Según la información difundida el pasado sábado por El País, la gran base logística se la disputan -además de la ciudad conquense de Huete- Toledo, Talavera de la Reina, Jaén y Aguilafuente (Segovia). También se han postulado oficial u oficiosamente, o están valorando hacerlo, desde la capital segoviana, Asturias, Zaragoza y Albacete.
¿Por qué se incluye a Huete entre las candidatas?
En octubre de 2019, el alcalde de Huete, el popular Fran Doménech, envió una serie de cartas a diferentes instituciones estatales ofreciendo su municipio como sede de centros laborales públicos, ya fueran de nueva creación o trasladados. Algunas de esas misivas iban dirigidas al Ministerio de Defensa y a los tres ejércitos y, aunque en esa gestión no se postulaba directamente para alojar esta gran base logística, esa disposición del Consistorio optense ha supuesto que ahora se identifique a Huete como una de las candidatas.
El regidor alcarreño señala que estarían encantados de ser sede de este gran centro, por lo que van a trabajar con todas las herramientas que estén en su mano para conseguirlo. Avanza facilidades en cuestiones como licencias y terrenos y se muestra convencido de la capacidad de adaptación del municipio y de la comarca para cumplir las condiciones para acoger la base.
¿Quién tiene más posibilidades?
El Ministerio de Defensa nunca se ha pronunciado oficial e inequívocamente sobre ello y, al ser un proyecto a largo plazo, todo está abierto por el momento.
La capital toledana ha sido reiteradamente señalada como favorita por círculos militares incluso hubo informaciones de la prensa especializada que daban por hecha su elección en abril del año pasado, situando la infraestructura en una parcela de 40 hectáreas próxima al campo de maniobras y de tiros de Los Aliajares, aunque ese extremo no llegó a confirmarse nunca.
Jaén se está mostrando como la candidata más activa. Ha ofrecido ya a Defensa dos terrenos próximos a la ciudad (uno de 120 hectáreas y otro de 100) se ha mostrado dispuesta a colaborar en la financiación. Tanto el pleno del Ayuntamiento como el de la Diputación Provincial han votado sendas resoluciones reclamando la macrobase para su tierra, petición a la que se ha adherido otros municipios de su territorio. Y hasta este martes se presentó un concurso para elegir la mascota y un emblema de la candidatura jienense, como si este proceso fuera el de elección de una sede de los Juegos Olímpicos o una exposición universal.
Basado en información publicada por el Ministerio de Defensa, Ejército de Tierra, El País, Infodefensa.com, Voces de Cuenca, Ideal de Jaén, Plataforma de Contratación del Estado, BOE, La Voz de Talavera, El Norte de Castilla, y El Comercio.
