Durante el mes de agosto ocho personas murieron por COVID-19 en la provincia de Cuenca, según han informado fuentes de la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha a este periódico. La cifra supone un importante descenso respecto al dato registrado en el mes de julio y es la misma que la que la del mes de junio.
De esta forma, el dato de julio queda formando un pico en cuanto al seguimiento de evolución estadística, aislado de los meses que le anteceden y preceden. En julio fueron 23 las víctimas mortales en la provincia conquense, y en junio y agosto el dato fue de ocho.
En cuanto al dato de agosto, en el que se registraron ocho decesos, se trata de una cifra inferior a la del mismo mes del año inmediatamente anterior, en el que hubo doce fallecidos por COVID-19. Se trata asimismo del primer mes en el que desciende con su equivalente con el año anterior desde que a finales de marzo el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas eliminaran los aislamientos de contagiados leves o asintomáticos y en abril se eliminarse la obligatoriedad de la mascarilla en interiores.
La séptima ola de COVID acumula 53 fallecidos en la provincia de Cuenca, 35 más que en el mismo periodo de 2021. En cuanto a los datos de agosto de 2022 hacen que se sitúe como el 16º mes con más muertos en la provincia conquense desde que comenzó la pandemia.
