La temporada de setas de primavera en la Serranía de Cuenca está comenzando. Así lo ha señalado el experto en micología Emilio Monrabal en declaraciones a Voces de Cuenca, indicando que por los prados de altura se pueden encontrar especies como la seta de cardo, senderuelas, champiñones y perrechicos, así como boletus pinícolas en pinares viejos.
Por el momento, señala el experto, las condiciones están siendo los suficientemente buenas como para que la campaña de setas primaverales haya empezado. “Otros años estaríamos terminando y este 2023 está empezando”, sentencia.
Además, las lluvias de la primera mitad de junio pueden impulsar el brote de más ejemplares, puesto que los prados serranos se han llenado de agua. Eso sí, puede ser una campaña especialmente corta, sobre todo dependiendo de cuánto calor haga en los próximos días, puesto que puede hacer que las setas se agusanen al haber tanta humedad en los prados, apunta Monrabal.
Otra de las posibilidades es que la temporada se alargue si las previsiones meteorológicas se cumplen y la semana que viene cae alguna tormenta que lleve hasta el comienzo del verano un nuevo ciclo de setas de primavera. Saldrán previsiblemente como hasta ahora, en prados de la Serranía y siempre en zonas de altura.
Por otra parte el agua que está cayendo este mes de junio puede servir para impulsar una buena temporada de setas estivales, donde en los montes de Cuenca brillan boletus aestivalis o amanita caesarea, entre otras especies. En cuanto a las zonas, la Serranía media y la baja ofrecerán a priori las mejores posibilidades para recolectarlas.