El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, Jesús Segura, como representante de la empresa Tranto Restauración, han protagonizado este jueves la entrega de llaves y la firma del contrato de explotación del restaurante de las Casas Colgadas. La cesión se realiza por el periodo de quince años y el adjudicatario estará obligado al pago de un canon anual de 50.400 euros. Las condiciones establecen que podrán utilizarse las famosas balconadas para ofrecer los servicios de hostelería, uno de los reclamos de un espacio icónico que se recupera tras casi diez años cerrado con la mira puesta en la obtención de una estrella Michelín, galardón que ya ostenta Segura por su gestión en Trivio.
El primer edil ha expresado su profunda satisfacción ante un trámite que permite «recuperar un espacio magnífico para la restauración que llevaba cerrado desde 2013. Es el principal estandarte de la ciudad y llevaba demasiado tiempo sin utilidad. Desde hoy, el adjudicatario tiene un plazo de dos meses para poner en marcha el restaurante estrella de la ciudad».
El regidor ha precisado que «las terrazas o balconadas, si así lo desea la empresa adjudicataria, será practicables para poder comer en ellas» mientras que el adjudicatario ha indicado qee «hasta que no veamos la nueva iluminación no podremos decir si es viable o no. Pero si se puede, yo encantado de que se pueda comer ahí.
Jesús Segura ha reconocido que siente «una ilusión tremenda por volver después de 22 años al lugar en el que empecé, en el que tuve su primer empleo. Ahora nos toca correr, y mucho, para implantar un restaurante en un espacio que es un icono de la ciudad». Entre las modificaciones del proyecto solicitadas al Ayuntamiento y concedidas figura la adaptación de la entrada para permitir el acceso de personas con movilidad reducida. En cuanto a la posibilidad de instalación de terraza en la Plaza de Ronda, ha precisado que es una posibilidad que no está contemplad en el contrato pero ambas partes han visto con buenos ojos su posible materialización.
Continuidad para una oferta gastronómica de éxito
Segura ha manifestado que, por la morfología del espacio, en principio va a a haber dos restaurantes: Casas Colgadas y Casa de la Sirena. «ontinuaremos con lo que estábamos haciendo en Trivio, que es esa cocina de secano que luego evolucionó. Y por enclave vamos a potenciarlo más porque estamos en la imagen internacional de esta ciudad. Creo que es una filosofía de trabajo que nos ha dado mucha relevancia a nivel gastronómico y esperemos que Michelin, el día de mañana, nos vuelva a querer un poquito».
El chef conquense ha confirmado que Trivio seguirá funcionando. «Pablo, mi mano derecha y socio, se quedará en Trivio con esa parte informal, ese bristot que la gente pensaba que era caro y ha cogido fuera gracias a la gente de ser un restaurante con una oferta gastronómica importante y en la que también habrá sorpresas».
Jesús Segura ha indicado que la plantilla del restaurante de las Casas Colgadas estará en torno a las 14-16 personas «y todavía falta cubrir alguna plaza, así que si alguien se anima…».