Después de que el Consejo Escolar Municipal del Ayuntamiento aprobara el Reglamento de la Comisión Local de Absentismo Escolar con el fin de mejorar la prevención, intervención y seguimiento del absentismo escolar, las reacciones de la comunidad educativa no se han hecho esperar. Los profesionales insisten en la necesidad de avanzar en la normativa.
Ana Bordallo Jaén, profesora del CRA (Centro Rural Agrupado) Guadiela con cabecera en Priego, ha señalado que «era necesaria» una regulación. Ha explicado a Voces de Cuenca que ahora mismo existe un protocolo que se activa en todos los centros educativos cuando un niño falta un número determinado de veces. A su juicio, «no funciona» porque el niño puede estar faltando dos semanas seguidas al colegio y cuando vuelve el protocolo no se activa hasta que no vuelva a faltar un número concreto de días. Es así como la profesora de Educación Primaria entiende que el protocolo de absentismo actual «no vela ni protege al menor que, por las razones que sea, no asisten al colegio».
Ha añadido que esta realidad, cuando el entorno familiar y social no está llevando al menor al colegio ni vela porque reciba su derecho a la educación, «no solo afecta a los centros de educación primaria, sino también en los centros de educación secundaria» cuando es el propio menor quien decide de manera voluntaria saltarse las clases y no asistir al instituto.
En este sentido, el nuevo documento que regula la organización y funcionamiento del Consejo Escolar creado en el mes de junio acomete esta problemática. «Habría que darle una vuelta y atender a las realidades diferentes para que se actúe en beneficio del menor, garantizando el derecho a la educación», ha concluido la docente.
A este respecto se manifestó el concejal Víctor Manuel Fernández el pasado día 17 quien consideró necesario abordar el problema desde una «óptica integral» y acometerlo en cuanto se detecta. Argumentó que el absentismo, propiciado por determinadas circunstancias del entorno del alumnado, influye directamente en sus oportunidades de formación y en la entrada en el mercado laboral, y puede propiciar en el futuro una situación de exclusión social.
El Reglamento aprobado está conformado por cinco apartados, además del Título Preliminar, y regular las competencias, composición, organización, funcionamiento y posible modificación o disolución de la Comisión Municipal, y la emisión de informes, propuestas y recomendaciones.