La mina romana de ‘La Condenada’, situada en Osa de la Vega, ha iniciado su sexta temporada de apertura al público. Desde el pasado 2 de marzo y hasta el 1 de noviembre, los visitantes podrán recorrer este enclave minero único por mantenerse inalterado desde la época romana.
El motivo del cierre anual de la mina responde a la protección de una colonia de murciélagos que hiberna en su interior durante los meses de invierno. Una vez finalizado este periodo, la mina reabre para recibir a turistas y amantes de la historia y la arqueología.
Según Miguel Ángel Rada, responsable de la explotación turística de la mina, cada año aumenta el número de visitantes, alcanzando en la última temporada unas 4.000 personas en los seis meses de apertura. «La mayoría de nuestros visitantes vienen de fuera, incluso de otros países como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá o algunos países asiáticos. Sorprendentemente, la gente de la zona la conoce poco», señala.
La mina forma parte de un complejo minero de 26 explotaciones antiguas, aunque solo una de ellas está habilitada para el público. Su singularidad radica en que no ha sido modificada desde los siglos I y II, cuando comenzó a ser explotada. «Es lo que más valora el público, la autenticidad del lugar», destaca Rada.
El recorrido de la visita incluye un centro de interpretación con material audiovisual, una ruta exterior por el complejo minero y finalmente el acceso a la mina habilitada. La experiencia, que dura aproximadamente dos horas, está recomendada para mayores de seis años.
A pesar de su importancia histórica y del creciente interés turístico, Rada denuncia la falta de apoyo institucional. «Este lugar tiene un potencial enorme, pero las administraciones no han mostrado interés. Solo contamos con una pequeña ayuda del ayuntamiento, que hace lo que puede con los recursos que tiene». Reclama una mayor inversión en investigación y mejoras en el acceso para garantizar la conservación y el aprovechamiento del patrimonio minero.
Las visitas se realizan los fines de semana en dos turnos, a las 11:00 y a las 17:00, con reserva previa a través del teléfono de contacto o en la web oficial (www.minalacondenada.com). Con la llegada de la primavera, ya han comenzado a recibir reservas, especialmente de colegios que combinan la visita a la mina con las jornadas de teatro en Segóbriga, dada la estrecha relación histórica entre ambos yacimientos.
Desde la dirección de la mina animan a los visitantes a descubrir este enclave único, que sigue siendo testigo silencioso del pasado minero de la región.
