A Pilar Plaza Langreo

José Alberto Estival Martínez

Un reflejo en el océano de las miradas de cientos y cientos de pacientes pasados por tus manos, ese consuelo de entrar y salir con una sonrisa y de la mano o la triste desdicha de un lloro desconsolado.

Una vida marcada por la lucha y sacrificio por pérdidas y por crecer y criar a sus hijos.
A Dña. Pilar Plaza, llevando en alabanza y entre honores de quien la conoce, aprecia, valora, respeta y quiere.

Constancia de largas esperas, ejemplo en su trabajo y esa buena cara a diario, dejando a un lado los malos ratos por los que todos atravesamos.

A desdichas se ha enfrentado y batallas como todos ha perdido y ganado, a diario multitud de casos novedosos, arrastrados o de antaño; compañeros de trabajo han pasado por su lado y de sus ojos y mente, ambos jamás serán olvidados.

Después de tantos y tantos años con esa capa de héroe enfundando tanto dentro como fuera del trabajo; no podía ser de otra manera que hasta has tenido el arrojo, coraje y valor, de enfrentarte a esta pandemia (COVID-19), capitaneado a ese ejército de profesionales de bata blanca y unos de los héroes y actores principales de esta batalla y de la lucha diaria.
No podías despedirte de otra manera, el arropo de toda esa gente que te acompañó y acompaña, una época de uniformidad adaptada y distancias aconsejadas, esos abrazos simulados o esos besos camuflados en palabras, unos presentes para el recuerdo de tus jornadas y el mayor de los tesoros, el paso de los años tatuados en el alma.

Una despedida arropada, un esfuerzo carente de palabras, donde las formas, la entrega, la adaptación y tu esculpida figura por donde andas, es la mejor hoja de presentación o el mejor de los currículum por donde vayas.

Orgullo de vecinos, amigos, conocidos y una familia que la cuida, idolatra y ama; unos hijos cargados de valores y que representan la educación y principios, que durante su vida les enseñaras.

Pilar recibe estas palabras de un vecino de tu pueblo, amigo de tus admirables y ejemplares hijos, nadie es perfecto nadie es más que nadie pero tampoco menos; con cariño, admiración y respeto de este escritor solidario y por afición, Benemérito de alma, corazón y educación.
Felicidades por tu labor en cada escenario y por tu reciente jubilación, motivo por el que se componen estas frases en forma de homenaje por tu trayectoria en la vida y en tu honor.

  «QUE NADA NI NADIE NOS IMPIDA SOÑAR, HASTA EL INFINITO Y MÁS ALLÁ»

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