Mimbres de Cañada del Hoyo para ataúdes ecológicos en el Reino Unido

Una empresa de la Serranía de Cuenca exporta mimbre a Reino Unido, donde algunas entidades lo utilizan para construir ataúdes

La empresa ‘Mimbres Moriana‘, ubicada en Cañada del Hoyo, lleva años exportando sus productos a países de todo el mundo. Uno de sus clientes más afianzados es Reino Unido, con el que comercializan su mimbre cultivado en la Serranía de Cuenca.

En los últimos años, se ha puesto de moda en los países anglosajones un producto que puede resultar peculiar, debido a que en países como España, no es algo habitual: los ataúdes de mimbre. Aunque la empresa cañutera no construye los féretros, sí es uno de los productores de mimbre con los que trabajan empresas como ‘Somerset Willow‘, que se ubica en una zona cercana a Bristol, donde se concentra gran parte de este negocio.

‘Somerset Willow’ no solo es una de las empresas pioneras en el negocio de los féretros de mimbre, sino que también han creado el «ataúd viviente», el primero en el mundo hecho a base de mimbre vivo, según se puede ver en su web. Comenzaron en el negocio de los féretros en el año 1998, y a lo largo de los años han ido integrando novedades, como por ejemplo, permitir personalizar el ataúd a través de la web y comprarlo online, con un periodo de envío de hasta 48 horas.

Los precios de estos féretros en Inglaterra suelen rondar entre las 400 y 900 libras, mientras que en España, un ataúd convencional puede llegar a costar entre 800 y 1.500 euros, aproximadamente.

El principal obstáculo que dificulta que se construyan ataúdes de mimbre en España es el transporte, tal y como nos asegura Javier Moriana, gerente de la empresa conquense. Sin embargo, sí han hecho algunas muestras. «La técnica es la misma que la cestería, se trabaja en tejido, se puede poner un fondo de madera y bambú para los bordes, además de darle varias formas y colores», explica Moriana.

¿Por qué se han puesto de moda los ataúdes de mimbre? En los últimos años, las teorías ecológicas y sostenibles han defendido que el mimbre es una forma más amable para la naturaleza de enterrar a los fallecidos, ya que, supuestamente, se desintegra de forma progresiva y es menos contaminante que la madera de los ataúdes convencionales, tratados con barnices y otros productos.

No obstante, el origen de esta tendencia se remonta al año 2003, cuando el cantante y actor Adam Faith fue enterrado en uno de ellos. Aunque Faith fue uno de los pioneros en patentar esta tendencia en Inglaterra, en los países del Este, como Rusia, es algo muy habitual, según explica Moriana.

La razón por la cual en España no es común que se comercialicen estos ataúdes, tal y como explica Javier Moriana, es porque existe un decreto del 20 de julio del año 1974 que no contempla que los ataúdes estén fabricados con otro material distinto a la madera, estableciendo este material como obligatorio.

Sin embargo, sí se ha comenzado a trabajar en cajas fúnebres para mascotas. «En Salamanca y la zona de Galicia sí ha habido gente que ha creado ataúdes para mascotas con este material, pero mientras en España no cambie la ley, construir ataúdes para personas no es rentable, ya que la exportación de ese producto sería compleja debido al tamaño», explica Moriana.

Aunque de momento construir féretros a base de mimbre no sea una realidad cercana en España, empresas como ‘Mimbres Moriana’ ponen en el mapa a nuestra provincia, exportando este producto cultivado en la Serranía a países como Argelia o Reino Unido.