Es lunes, 10 de octubre de 2022. Han pasado ya casi veinte horas desde que finalizaron las competiciones del fin de semana en Cuenca y Pamplona, dos campeonatos de España para empezar tras el parón vacacional en categorías menores. Tras una noche difícil para conciliar el sueño, desterrados los nervios y la tensión propios de una competición increíble, pongo manos a la obra para abordar esta crónica invadido, eso sí, por la emoción y el delirio. Por un momento dejo atrás la ilusión, esa que me persigue continuamente y me pregunto, ¿y ahora qué? ¿Qué vas a decir en esta ocasión de un equipo del Club tras lograr un subcampeonato nacional a todas luces imposible cuando llevas un tiempo contando que este Club hace historia tras historia? Di lo que sientes, me respondo, que hay que confiar siempre, creer, luchar, dejar correr los sentimientos, transmitirlos… saber que podemos, que existimos, que competimos. Es lo que hacemos con lo que tenemos, y toda España lo está viendo.
Cuento la realidad, esa que no engaña: cuatro oros individuales de libro, de dominio abrumador, algunos sorprendentes (Mónica Guijarro, Hugo Bermejo, Jane Muñoz y Diego Hernando) y una plata y un bronce de Alex Hontecillas y Diego Hernando. Todo eso aderezado con la guinda de un complemento sublime, el imposible, el histórico, el que marca las diferencias; el que por su dificultad de un conjunto diría que vale tanto como las seis medallas individuales logradas durante este fin de semana y la veintena acumuladas en campeonatos de España en este impresionante e increíble 2022. Es una medalla de plata solemne para cada uno de los ocho jovencitos del equipo nacidos en 2009 y 2010 y de sus compañeros que lo han tenido que ver desde la grada sufriendo y disfrutando al mismo tiempo. Es un trofeo que, hasta hoy, estaba reservado casi en exclusividad a los clubes más importantes de España. La mejor clasificación del Club Atletismo Cuenca hasta la fecha había sido el undécimo puesto de los chicos en Guadalajara en 2018. Ahora, con este segundo puesto su nombre figurará en el libro de historia de este evento junto a los pocos clubes que gozan de tal privilegio.
Nos ganó el Colegio Diputación de Castellón con 732 puntos tras una remontada agónica en la última prueba, 80 metros. Hasta ese momento y merced a las impresionantes clasificaciones de los chicos del Rujamar Atletismo Cuenca en la jornada dominical en las pruebas de 80 vallas, 2.000 marcha y 1.000 metros, la remontada fue apoteósica desde el quinto hasta el primer puesto a falta de esa última puntuación. Los castellonenses, que habían sido los ganadores en siete de las ocho ediciones anteriores fueron los únicos capaces de superar los 722,5 puntos de los conquenses.
Lo sucedido en la abarrotada Pista de Atletismo del Luis Ocaña de Cuenca tras este nuevo desafío organizativo de un campeonato nacional por el Ayuntamiento de Cuenca provocará un torrente de ilusión entre los jóvenes atletas del Club y será la mejor promoción del atletismo entre los más pequeños de nuestra ciudad y provincia. Además, como no, ayudará lo ya logrado y lo que queda por llegar en noviembre y diciembre. Por ahora, el Rujamar Atletismo Cuenca ya tiene un puesto entre los clubes nacionales con mayores logros en 2022. No serán muchos los que puedan presentar semejante balance en las categorías menores cuando finalice el año y con él la temporada 2022.