El nadador paralímpico José Ramón Cantero, que tiene orígenes en Moncalvillo de Huete, consiguió la medalla de bronce en la prueba de relevos libre mixto 4×100 metros en los Juegos Paralímpicos de París 2024, que llevará a su pueblo en poco tiempo. «La llevaré para enseñarla a la gente, ya que muchos han estado pendientes de todas las pruebas y poniendo siempre mensajes de ánimo, para que también puedan verla y sentirse parte de este éxito», cuenta el medallista a este periódico.
Cantero dice que es ahora cuando está siendo consciente de haber ganado el bronce. «Acabas de ganar la medalla y estaba en una burbuja, ese día fue toda mi familia y no era consciente. Al salir y coger el móvil lo tuve que apagar. No es lo mismo ganar un metal en un mundial que en los Juegos, te felicitan políticos, deportistas, la Casa Real… tenía mensajes de gente que nunca pensaba que me iba a escribir», resalta el nadador paralímpico, que se ha dado cuenta de la repercusión que ha tenido una vez ha llegado a su casa con su gente.
Las exigencias, señala, de este evento con otras competición son mayores, especialmente a nivel mediático «que se dispara todo», ya que en las gradas ves a todos los presidentes de los países, la reina, «y eso hace que mucha más gente se interese por lo que hacemos».
Admite que en estos Juegos, ha sacrificado un poco sus pruebas individuales para centrarse en el relevo porque quedaron segundos en los dos últimos mundiales y «teníamos muchas posibilidades, y hemos ido con ello a muerte». Sin embargo, Cantero admite que aunque haya ganado también dos diplomas, en 100 mariposa y 200 estilos, le ha marcado «para mal» no haber tenido a sus paleros porque no estaban convocados. «El primer día que nadé el 200 estilos me choqué con la pared y la confianza que yo llevaba cayó muchísimo, y empecé a nadar con más miedo. Me ha hecho disfrutar los Juegos un poco menos. En este sentido, la Federación y el Comité Paralímpico tendrían que centrarse más en estas cosas y que no falta el equipo de confianza de los nadadores, porque es fundamental», asegura Cantero.
En líneas generales, su experiencia en París 2024 ha sido «una locura desde el primer día y comparado con los de Tokio, que era pandemia y las gradas estaban vacías». «A nivel de público, ha vuelto la esencia de los Juegos y a mí me ha encantado».
Ahora, José Ramón Cantero está realizando junto a los demás deportistas paralímpicos un recorrido por las instalaciones de los patrocinadores, y algunas audiencias y visitas con ministros y senadores. Después, afirma que se va a coger un mes de vacaciones, en los que aprovechará esos días para escaparse alguno de ellos a Moncalvillo. «La gente del pueblo ha estado muy volcada en redes sociales conmigo, y tengo muchas ganas de ir porque tengo muchos amigos allí y todavía no he ido. Moncalvillo es mi refugio, es el lugar donde voy cada vez que quiero descansar».
Su futuro en la natación paralímpica
Cantero cuenta que durante estos meses se va a preparar para el mundial que se celebra en septiembre de 2025 en Singapur. Sin embargo, su intención es restructurar su vida, ya que «hasta ahora llevaba un ritmo estresante. Yo vivo en Móstoles, pero entreno en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid, y muchos días que lo hago mañana y tarde me tiro cuatro horas en transporte público, que es una locura. Entonces quiero buscar más la comodidad para entrenar, que cuando ganas medalla se te facilitan más las cosas».
Aun así, una vez que comience la temporada, Cantero y su equipo se sentarán para ver a qué competiciones internacionales irán para buscar la clasificación