El Rebi Cuenca ofrece su peor cara ante el Barcelona y recibe una goleada de escándalo en el Palau (46-18)

Los de Lidio Jiménez se han visto lastrados desde el inicio por las pérdidas en ataque que propiciaban goles fáciles para un rival implacable y que no perdona

El Barcelona ha pasado por encima del Rebi Cuenca y le ha borrado de la cancha desde los compases iniciales. El cuadro conquense ha pagado los platos rotos del inicio ligero con empate de los blaugranas ante el Bidasoa y no han tenido piedad. El resultado final, de escándalo: 46-18, 28 abajo para el Rebi, tras ir a los vestuarios 28-11. De hecho, el Barcelona ha estado en condiciones de romper el récord de anotación registrado en el balonmano español fijado en 52 goles.

La primera parte ha resultado nefasta para los de Lidio Jiménez a pesar de los dos tiempos muertos que el entrenador visitante ha solicitado para corregir el panorama. Los catalanes son una apisonadora que no perdona y han aprovechado sin compasión las constantes pérdidas de balón en ataque que se convertían en contraataques y goles fáciles para los jugadores locales. Si a un equipo sublime encima se le dan facilidades…. Para colmo, cuando los jugadores del Rebi completaban jugada con opciones de marcar aparecían las paradas de un Pérez de Vargas que se iba a vestuarios con ocho intervenciones, varias de ellas de mucho mérito.

La segunda parte ha discurrido por cauces similares. La nota positiva, las intervenciones de David Mach que ha conseguido en cierto modo ‘frenar’ la locomotora azulgrana que no hace prisioneros y se muestra implacable en todas las facetas del juego: desde los nueve metros, en los extremos, en ataque estático, al contraataque… Y para sumar mala suerte, hasta los rebotes les resultaban favorables. De esta manera, el marcador se ha seguido ampliando para los locales con ventajas desacostumbradas y que no hacen justicia a la diferencia real entre ambos equipos.