Así cribará el Incarlopsa Cuenca los 100 elegidos que podrán asistir a cada partido

Los socios, que ya tenían que serlo la temporada pasada, tendrán que pagar una cuota inicial de 50 euros y otros 15 por cada encuentro, a los que podrán acceder en turnos rotatorios

Aquellos que deseen inscribirse como socios del Incarlopsa Cuenca (Balonmano Ciudad Encantada) en la inminente temporada 2020-21 deberán abonar una cuota inicial de 50 euros y, aparte, la entrada individual de cada partido, cuyo precio se ha fijado en 15 euros. 

Así se ha aprobado este lunes en la asamblea del club celebrada en el El Sargal. Una asamblea atípica y numerosa a la que, en cumplimiento de la normativa sanitaria, sólo han podido asistir 100 aficionados. Varios de los que aguardaban en la cola han tenido que quedarse fuera del pabellón y no han podido participar en el acto.

Precisamente las limitaciones establecidas por la Junta de Comunidades al aforo de los eventos deportivos que se desarrollan espacios cerrados (más estrictas que las de otras autonomías) han obligado al club a organizar turnos rotatorios para cribar entre los socios quién puede asistir a los encuentros.

A cada partido podrán ir un máximo de 100 espectadores, como señala la normativa. 60 de ellos serán socios de una lista general, que adquirirán el derecho a ocupar las gradas por riguroso orden de inscripción. Es decir, para el primer partido, previsto para este miércoles contra el Villa de Aranda, podrán ir del número 1 al 60. Al siguiente del 61 al 120, en el tercero del 121 al 180… y así sucesivamente en las jornadas posteriores. Una vez la lista haya dado los primeros espectadores tendrán una segunda oportunidad y podrán regresar al pabellón. 

Otras 30 plazas de cada partido se reservan para los socios que, además, sean miembros de la Furia Conquense. También tendrán que ir rotando. Isidoro Gómez Cavero, el presidente del club, ha explicado porque se ha elegido ese porcentaje porque “es aproximadamente el que la temporada pasada representaron los peñistas” (más de un 20%, ha indicado) y porque entiende que el colectivo «lleva muchos años» y al equipo le interesa contar con una presencia constante de este grupo en las gradas por su labor animadora. 

Las 10 entradas restantes del cupo de cada jornada se quedan para posibles necesidades del club, en función de cómo se contabilice personal de apoyo, autoridades o prensa. No se vendrán localidades para aquellos que no tengan carné ni podrán sacárselo aquellos que el año pasado no lo poseían; no se admitirán nuevos socios.

El club irá avisando a través de los medios de comunicación, las redes sociales y un correo electrónico de qué tramos de números tienen derecho a asistir a cada encuentro. La asignación será personal, no se podrá dejar el carné (o número) a otro aficionado porque va asociado a un nombres y unos apellidos que se tendrán que poner a disposición de los rastreadores por si se produce algún positivo de coronavirus entre los asistentes. 

Si un socio no puede asistir al partido que le corresponde lo que sí podrá hacer es comunicarlo «con la mayor antelación posible», aunque el plazo exacto no se ha fijado, para ceder su turno a otro socio que ocupe otro lugar en las listas con el fin de que no le corra turno. No obstante, si se observa que alguien está especulando con sus derechos o tratando de trampear la asignación se podrá retirar su derecho de asistencia. 

En el escenario de que el Gobierno regional decida ampliar los aforos de estos espacios también lo harán proporcionalmente los turnos de cada partido. Y, si por un positivo u otro imprevisto se suspende un encuentro, los socios que iban a acudir a él podrán hacerlo en el siguiente disponible.

Asimismo, en el caso de que se cree algún tipo de plataforma de pago que ofrezca los encuentros televisados tendrán acceso exclusivo a las retransmisiones aquellos que hayan abonado la cuota inicial. La posibilidad está encima de la mesa y preparada técnicamente a expensas de que el conflicto de Asobal y la Federación remanse y haya acuerdo sobre los derechos, según ha apuntado Gómez Cavero.

Ser socio también dará derecho a reservar asiento en El Sargal para la temporada 2021-22, accediendo incluso a aquellos de socios de temporadas pasadas que no hayan renovado su carné.

Precio más caro desde noviembre e inscripciones desde este martes

El precio establecido es único, independientemente de la edad o condición de los seguidores. Ni estudiantes ni jubilados o parados tendrán bonificaciones. Tampoco los peñistas. Una de las cuestiones más debatidas en la asamblea fue precisamente si los menores de edad tenían que pagar lo mismo que los más. Finalmente se decidió que así fuera y también se aprobó que el precio de 50 euros se mantenga hasta el 8 de noviembre. A partir de esa fecha la cuota inicial se encarece hasta los 75 euros. 

Este plazo de inscripción exprés y «a contrarreloj», como lo ha definido Gómez Cavero, comienza este martes 8 de septiembre. Los interesados han de dirigirse a la Asesoria Gómez Castillejo, que está ubicada en el bajo del número 5 de la calle Alicante. El horario es de 9:30 a 13:30 horas (de lunes a viernes) y de 17:30 a 20:30 (de lunes a jueves). Será necesario al apuntarse proporcionar el DNI, el carné de la temporada 2019-20 y una dirección de email de contacto y rellenar un formulario de protección de datos. El cupo de la Furia se tramita a través de la propia peña.

Los más madrugadores que entren en los listados para la acudir a los dos primeros partidos tendrán que aprovechar la ocasión para retirar ya sus entradas.

Gastos

Gómez Cavero ha pedido disculpas por la tardanza en convocar la asamblea y en presentar esta fórmula (la aprobada, salvo algunos matices, ha sido la que ha ofrecido la directiva) pero ha justificado la demora por la gran incertidumbre, general y deportiva, que se cierne sobre la temporada.

«Es realmente más que complicado, casi imposible», ha reiterado explicando que los precios fijados tratan de contribuir a a un equilibrio presupuestario que parece una quimera. Los ingresos directos de los aficionados suponen tradicionalmente «un 35/40% del total» y lograr patrocinadores «también está siendo más complicado este año». Aunque ha confiado en que las instituciones mantengan las aportaciones presupuestarias (aunque mañana pueden decir que tienen otras prioridades) ve realmente complicado que salgan las cuentas para afrontar los gastos. Y es que ha revelado que el coste de cada partido en cuestiones como arbitraje y organización está por encima de los 2.300 euros. 

«Esto es un auténtico cisco», ha clamado con una castiza expresión conquense temiendo por el panorama en el que puede derivar la temporada. «Si por ejemplo se exigen PCR a los jugadores todos los partidos no lo podríamos asumir porque eso supone miles de euros añadidos. Además de que organizativamente sería un problema por las cuarentenas que se deberían guardar mientras llegan los resultados». En el ámbito económico ni directivos ni miembros de la asamblea han mencionado siquiera ningún reembolso por los partidos del abono suspendidos a causa de la pandemia y por tanto no disfrutados.

En el aspecto estrictamente deportivo, que apenas se ha tocado, Gómez Cavero ha afirmado que se ha confeccionado una plantilla «para funcionar bien» y está convencido de que así será. Más pesimista ha sido su predicción sobre las categorías inferiores, expresando serias dudas de que puedan salir adelante esta temporada.

La sesión también ha permitido conocer las nuevas equipaciones del equipo. La principal recupera el rojo en la camiseta, pigmento done converge el color corporativo del patrocinador principal y el escudo de la capital conquense, con pantalones blancos. La segunda equipación invierte el reparto cromático de las prendas: camiseta blanca y pantalón rojo.

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