Referencias conquenses en el último Pokémon: batalla junto a un molino y pasear entre arte abstracto

La compañía nipona se ha inspirado en España en su videojuego Pokémon Escarlata y Pokémon Púrpura, que ha salido a la venta este viernes

Este viernes ha salido a la venta el último videojuego de Pokémon, una de las franquicias más exitosas de la compañía de consolas japonesa Nintendo. Como ha sido norma habitual durante los 26 años desde su nacimiento, llega en dos ediciones prácticamente gemelas que en esta ocasión se identifican con los colores púrpura y escarlata, y que como principal novedad su ambientación se inspira en España.

Y como no podía ser de otra forma, Cuenca está presente con sus molinos de viento y el arte abstracto, plasmados eso sí con el estilo y firma de la compañía nipona. En el mapa del juego, la zona se encuentra muy cerca de la ubicación que le correspondería si se extrapolase a la Península Ibérica.

Concretamente es en el Pueblo Altamía donde se pueden ver estos elementos. Un gran molino de viento preside la localización y a sus pies los jugadores tendrán que enfrentarse a Brais, el líder del gimnasio de la zona, al que hay que vencer para conseguir una de las ocho medallas, siguiendo la misma fórmula que en anteriores ocasiones. Un molino de viento cuya inspiración en los que hay en Cuenca no necesita explicación.

En Pueblo Altamía abundan las criaturas de tipo planta, y el examen que los jugadores tendrán que superar para poder retar a Brais será recoger varios ‘sunflora’, un pokémon que toma como referencia a un girasol, un tipo de cultivo muy frecuente en los campos conquenses.

Otro de los puntos de inspiración dentro de Pueblo Altamía es un lugar con una especie de grandes esculturas blancas y pinturas abstractas en el suelo que únicamente cumplen una función estética en la zona.

Además, también pueden observarse en la zona otros lugares que evocan a la región, como varias lagunas y humedales con pasarelas de madera que recuerdan a las Tablas de Daimiel. La gran ciudad central del juego toma referencias de Madrid, Barcelona y Toledo, como son la Sagrada Familia o el Alcázar. Sin multitud las referencias a España que hay por el juego, como que los equipos se identifiquen con naranjas y uvas, pokémon que recuerdan a la Dama de Elche, una aceituna y un cerdo, o el propio mapa de la región, por citar sólo unos pocos.