Jorge Sánchez Albendea afronta su quinto mandato al frente de la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Cuenca. Pese a su juventud, lleva media vida como máximo responsable del principal órgano de gobierno de la Pasión conquense. La falta de candidatos le ha ‘obligado’ por tercera vez, a mantenerse en el puesto para evitar el vacío de poder en la institución. Agradece el trabajo de todas las personas que le han acompañado y apoyado durante todos estos años «porque sin ellos no habría sido posible hacerlo». La dimensión adquirida por la Semana Santa requiere una dedicación elevada que supone roba tiempo a familia, amigos, aficiones… Por fortuna, la Junta de Cofradías disfruta de una etapa bonancible cuyo principal referencia son los desfiles procesionales del pasado año que, en conjunto, han recibido una calificación sobresaliente. El nuevo presidente de la JdC es consciente de la necesidad de retocar «algunos detalles» pero reclama «mantener las señas de identidad de nuestra Semana Santa». Entre los proyectos más motivadores figura la reforma del Museo, una iniciativa que consigue emocionarle al asegurar que «va a ser un reclamo más para Cuenca».
¿Qué le lleva a coger las riendas de la Junta de Cofradías de nuevo, por quinta vez? Tercera de forma extraordinaria.
Los Estatutos marcan que son ocho años el plazo máximo que se puede estar de presidente y la reforma curiosamente la hice yo. Por tercera vez he tenido que apelar al Derecho Canónico que permite a las asociaciones públicas de fieles, como en este caso la Junta de Cofradías, que ante una ausencia de candidatos para no dejar vacía la institución y siempre y cuando se tenga un respaldo mayoritario, superior a tres cuartas partes, pues se puede aplicar esa dispensación que es la que hemos utilizado ahora.
¿Y cómo afronta esta nueva etapa? ¿Con resignación ante la ausencia de relevo?
No. En ningún momento, y lo dije el día de la Junta General, quería dar una sensación de salvador de la patria, ni nada parecido. Lo hago porque lo tengo que hacer, porque no hay nadie, y la institución no se va a quedar vacía. Lo deseable hubiese sido un cambio en la institución, un recambio, pero también me quedo con lo positivo. Es decir que las hermandades me han apoyado más que la última vez. Que un 90% del electorado de la Junta de Cofradías siga confiando en tu gestión quiero entenderlo como un honor, un privilegio y una satisfacción muy grande, que sigan confiando en mí. Voy a intentar seguir trabajando en la misma línea que es lo que todo el mundo quiere.
¿Falta implicación entre los nazarenos de Cuenca para asumir responsabilidades en la Junta de Cofradías? Hay implicación para salir en las filas, sacar el paso pero para presidir la JdC…
Es verdad, y eso es innegable, que esto genera una gran carga de trabajo, es altruista y la cantidad de tiempo que roba pues echa mucho a la gente para atrás. También quiero pensar que lo llevo haciendo durante 16 años con mi equipo, no solo con la Comisión Ejecutiva, sino con otra mucha gente que ayuda continuamente. Lo que quiero dejar claro es que esto se saca, lo he sacado yo y no creo que sea muy especial al resto, simplemente haciendo una buena gestión y rodeándote de buena gente. Creo que ese es el principal hándicap que a la gente le puede echar para atrás: la cantidad de trabajo que tiene porque es verdad que la Junta de Cofradías muchas veces se convierte en un trabajo. Esta legislatura también vamos a trabajar en la línea de facilitar una organización interna que haga más atractivo o por lo menos no le de miedo a la gente entrar a trabajar. Al final, una hora antes tuve que presentar la candidatura porque no había nadie. Entendían que pudiera estar cansado y sería bueno que hubiese un relevo pero todo mundo estaba contento con mi gestión y me quiero quedar con ese mensaje. A partir de ahora toca trabajar para encontrar un relevo y un atractivo para la gente vea que se puede hacer.
¿Quizás aflojando los requisitos un poco sería más sencillo encontrar a alguien para presidir la Junta de las Cofradías? Tengo entendido que hay que ser miembro de la Junta de la Directiva de una Hermandad, por ejemplo
Cuando se hizo la última modificación, la que hemos referido también de los ocho años de mandato, también modificamos el Estatuto de la Junta de Cofradías y creo que ahora mismo es bastante abierto. De hecho, el presidente es el único que tiene que salir de los miembros de la Junta General que son 97 personas. Para el resto de la Comisión Ejecutiva el único requisito que se les pide es haber acreditado que durante tres años han pertenecido a una Junta Directiva de la Hermandad. Con lo cual eso creo que no es ningún hándicap. Lo veo muy abierto y todo el que quisiese lo podría hacer.
«En ningún momento he querido dar una sensación de salvador de la patria, ni nada parecido»
¿Cuáles son las líneas maestras de trabajo que se ha marcado para estos próximos cuatro años? ¿Cuáles son sus principales retos ?
Totalmente continuistas, como no podría ser otra manera. No tocar nada. Muchas veces mantener lo que tenemos es lo mejor. A lo mejor el miedo que hay en la gente es que hemos edificado un castillo, ahora hay que mantenerlo y eso es muy complicado. Ahora mismo somos un referente a nivel nacional. La semana pasada nos entregaban un premio en Cartagena. Nuestra Semana Santa está en el top dentro del mundo cofrade a nivel nacional. Entonces se trata de mantener ese nivel fuera, esa imagen que estamos transmitiendo al exterior. Lo principal, sobre todo, mantener la unión en el seno de las hermandades, que estén todas unidas como están hasta ahora. Eso, al final, es lo que nos hace mantener ese nivel de excelencia. Luego, cómo no, trabajaré internamente para buscar un relevo en la Junta de Cofradías. Y trabajar, también internamente, para crear una estructura interna que haga más atractiva a la gente el poder entrar.
¿A qué se refiere concretamente con crear una estructura interna para facilitar la entrada en la Junta de Cofradías? ¿En qué se concreta esa idea?
Hay determinados aspectos en los que tendremos que buscar gente que nos ayude de forma profesional, gente que nos eche una mano. Nuestros recursos económicos son muy limitados y los que tenemos, evidentemente, se tienen que dedicar a los desfiles profesionales. Pero sí que se pueden hacer determinadas cosas para aliviar la carga de trabajo que tenemos tanto con la Junta de Cofradías como con el Museo de la Semana Santa. Esa estructura interna es la que quiero crear para aliviar a todos de trabajo.
Ha comentado los desfiles procesionales ¿Se puede hacer algo por mejorarlos? ¿Agilizarlos quizás en algunas ocasiones? ¿Se plantean cambios de recorridos u horarios?
En cuanto a recorridos, ahora mismo no tenemos nada contemplado. En cuanto a horarios, tal vez pueda haber una modificación en adelanto de horario en la procesión del Lunes Santo. Se va a trabajar para ello. Y en relación a la duración de los desfiles… es verdad que hemos intentado que sean más rápidos. Este año, sobre todo, creo que todos los desfiles han ido mucho más rápido. Se va consiguiendo poco a poco pero es debido a la gran afluencia de nazarenos que hay. Es un bendito problema que tenemos. Evidentemente intentamos acelerar al máximo pero que ese acelerar tampoco supone que tengamos que ir corriendo. Nosotros, conforme ha quedado este año los desfiles procesionales este año, ojalá saliesen así en los años venideros.
«La Semana Santa de Cuenca está en el ‘top’ a nivel nacional y se trata de mantener ese nivel»
¿Firmaba la última Semana Santa para los próximos años, verdad, por todo?
Pues sí porque ¿Qué nos quedaría a partir de ahora? Bueno pues hay muchos detalles que pulir y, al final, esos detalles nos van a seguir engrandeciendo. Pero en cuanto a cumplimiento de horarios, en cuanto a orden, a devoción, a respeto, a falta de incidentes… Es que este año ha sido espectacular, entonces ojalá que sean todos así por muchos años más.
Comenta que hay detalles por mejorar. Le cito algunos a ver si son percepciones personales o los comparte: el tema de los móviles en las procesiones, con nazarenos hablando por teléfono en las filas, haciéndose fotos… Siempre hacemos referencia al respeto que hace falta desde el público hacia la procesión pero quizás desde dentro de las filas también haría falta…
Claro que sí, esos son los detalles a los que me refería. La uniformidad correcta, las zapatillas, los móviles…Pues esos son detalles que todos conocemos, que tenemos en mente y que decimos qué feos quedan, ¿no? Pues son detalles, ya tan mínimos, que es en lo que tenemos que incidir. También me refiero, con el tema de los detalles, a conservar nuestra esencia. Que sepamos conservar lo que es lo nuestro, nuestras señas de identidad.
¿A qué se refiere con mantener nuestra señal de identidad? ¿Cuál es la esencia de la Semana Santa de Cuenca? Porque también se quieren incorporar novedades, elementos que se han visto en otras Semanas Santas…
Debemos aprender unos de otros pero hay determinados elementos de nuestra esencia que deben cuidarse. Por ejemplo, el tema de los adornos florales, el tema de nuestras andas, la música que es tan importante en nuestra Semana Santa, nuestra austeridad, nuestro silencio. Esos son grandes rasgos que nunca debemos perder pero, evidentemente, claro que tenemos que aprender de otras muchas Semanas Santas. Cuando salimos fuera tenemos debates y hablamos del tema de la fotografía, de los móviles, cómo se regulan en un sitio o en otro…
¿Se piensa mantener cómo están los procesos para la elección del cartelista y el pregonero?
Sí, por supuesto, de momento sí. Así se recoge en el Estatuto. Si alguien plantease una reforma del Estatuto que afectase a la modalidad de elección y de cartelista se abriría el proceso para reformar el Estatuto en esas cuestiones concretas. Pero a día de hoy y de cara a la Semana Santa del año que viene va a seguir siendo lo mismo. De hecho, en la Junta de Diputación del mes de junio las hermandades tienen que decidir la modalidad de elección del cartel de la Semana Santa. Hay dos formas de hacerlo: hacer un concurso o por designación directa. Este año se ha decidido que siga siendo por designación directa y las hermandades tienen hasta el 31 de agosto para presentar a los candidatos que crean que cumplen los requisitos. Siempre se dan esas dos opciones. Y en la junta de septiembre se presentan esos candidatos, se realiza la votación y el que más votos consigue es elegido cartelista.
¿Tiene algún evento especial a la vista la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Cuenca?
Sí, tenemos uno muy importante porque es un evento de nueva creación concretamente en Úbeda. A finales del mes de octubre se creará la agrupación o asociación de las Juntas de Cofradías de las 15 Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España con el fin de poner en valor que somos Ciudades Patrimonio de la Humanidad y nuestras Semanas Santas.
«En cuanto a horarios, tal vez pueda haber una modificación en adelanto de horario en la procesión del Lunes Santo»
Le quería comentar el tema de la falta de banceros en algunas hermandades y los banceros que se incorporan en mitad de una procesión sin tener conocimiento, experiencia ni destreza de cómo llevar un paso ¿Eso lo podemos ver como un mal inevitable o sobre el que hay que preocuparse?
Creo que eso, gracias a Dios, ya es la excepción pero evidentemente es algo no nos gusta a nadie. Ahí quien lleva el peso es cada hermandad y hay que darles el valor a ellos porque ellos son los que han conseguido que sean hechos aislados. Ese valor lo tienen las hermandades conforme están trabajando y concienciando a sus hermanos con la seriedad que tienen los desfiles profesionales, que es otra señal característica. Nuestros desfiles son serios, sobrios, en silencio y lo tenemos que cuidar entre todos: hermandades, Junta de y el conquense que está en la calle.
Uno de los logros de estos últimos años ha sido la progresiva incorporación de la mujer a todos los eslabones de la Semana Santa de Cuenca
Nosotros siempre decimos que cuando en España no votaban las mujeres, la mujer ya votaba en la Junta de Cofradías. Siempre nos gusta destacar eso. Creo que ha sido algo natural y que no ha generado nunca debate ¿Por qué? Pues porque los nazarenos, al fin y al cabo, somos nazarenos y debajo del capuz todos somos anónimos. Ahora mismo vemos como ya hay muchas mujeres, en la propia Comisión Ejecutiva actual de los seis miembros que somos pues dos son mujeres, hay muchas secretarias de hermandades,… Es un proceso totalmente normal que se lleva haciendo desde hace muchos años.
También se ha producido bajo los banzos, en las Turbas…
Creo que la incorporación de la mujer a las Turbas, al desfile profesional, está ayudando mucho a esa normalización. Da gusto ver familias enteras. Ojalá que ayuden a acabar con esos 150 indocumentados y a ver si el año que viene no los vemos por allí.
Y esos 150 indocumentados da la impresión de que son cada vez menos…
Sí, son cada vez menos, es verdad. ¿Por qué? Porque se están viendo aislados, porque están viendo que no es su sitio y porque el mensaje que todos lanzamos es este. Ya no solo se trata de que las hermandades o la Junta de Cofradías son unas pesadas. No. Es que el Grupo Turbas se ha incorporado a la Junta de Cofradías y uno de los objetivos es que se ayude a que esta normalización se vaya haciendo poco a poco. Esto evidentemente no se consigue de la noche de mañana pero se están dando pasos muy grandes y creo que todos lo estamos viendo. La Turba de Cuenca ha ido evolucionando a lo largo del tiempo y espero y deseo que en no muchos años podamos dejar de contratar un grupo de seguridad para que la hermandad, en este caso de El Jesús, pueda avanzar tranquilamente y eso creo que se va a conseguir porque todos queremos eso.
Ha comentado la posibilidad de adelantar la salida del Lunes Santo ¿Cómo se encuentra este asunto y en qué términos se plantea?
Ahora mismo estamos hablando de la posibilidad de adelantarlo. No sé si vamos a hacerlo ya para el año que viene o dentro de dos pero se está hablando para no terminar la procesión tan tarde. Ahora se sale a las diez y media de la catedral. Bueno, pues tal vez se pueda adelantar. No sé si será media hora, si será una hora… Tenemos que hablar con la hermandad. Todo cambio importante de un horario, un recorrido… todo se debe hacer en primer lugar en el seno de la hermandad. Aunque las recomendaciones sean nuestras, todo se debe hacer con un consenso suyo. Creo que ahora mismo todos tenemos ese sentimiento, entonces, veremos cuándo se puede hacer.
«El nuevo Museo de la Semana Santa va a ser impresionante y será un reclamo más para Cuenca»
¿Cómo se encuentra la reforma del Museo de la Semana Santa? ¿Cuál es la idea que tiene la Junta de Cofradías?
La intención es hacer un museo nuevo, en una palabra. Se va a reformar por completo. El proyecto ya está hecho, lo que es el diseño del nuevo museo, está presentado tanto al Patronato de la Fundación de Museo de la Semana Santa como a las hermandades y la aceptación ha sido espectacular. Todos coincidimos que vamos a tener un museo impresionante. Este verano vamos a trabajar en la financiación. Todavía no tenemos la cuantía exacta de lo que nos va a costar pero va a ser un museo que tiene una inversión potente, fuerte. Posiblemente a mediados de octubre, primeros de noviembre, el museo cerraría sus puertas para acometer esta reforma que sería integral. Se nos irían, seguramente, tres meses de trabajos antes de inaugurar a finales de febrero, primeros de marzo del año que viene.
¿En qué consistirá este nuevo museo? ¿Qué aportará al visitante?
El concepto es totalmente nuevo porque es un museo donde el visitante va a participar, va a poder interactuar. Pues ahora, ¿Qué es lo que gusta? Pues ir al museo y hacerte un selfie, lo subes…en los museos normalmente no te puedes hacer fotos. Bueno, pues ahora sí. Tendrá unos textos preciosos, con música, con diferentes espacios dedicados a que el visitante conozca lo que son nuestras señas de identidad. Y todo esto terminado con un recorrido que va a finalizar con un audiovisual impresionante sobre la Semana de Santa de Cuenca que no va a dejar indiferente a nadie. Estoy muy ilusionado con ese proyecto porque va a ser un museo impresionante, va a ser algo que va a gustar a todos, nazarenos y no nazarenos. Va a ser un reclamo más para Cuenca porque va a ser Cuenca la que cuenta al visitante que es una ciudad nazarena. El espacio que ocupará es el mismo que ahora: la planta baja y la superior.
