Lo que el incendio y la rehabilitación de la Iglesia de las Concepcionistas no ha podido borrar es la sonrisa del rostro de las hermanas. En el torno atiende la religiosa Marta Alicia quien asegura que la fachada ya está terminada, pero «ahora están pintando el interior de la Iglesia». Sin embargo, su generosa invitación a entrar un poco más adentro permite entrar en detalle sobre las implicaciones que han tenido las obras para su Orden. «Han inquietado un poco a la comunidad, pero estamos bien», ha expresado con calma.
Los primeros dos meses después del incendio de mayo tuvieron que cerrar la Iglesia porque el fuego había impregnado de humo todo el interior y hasta el 20 de junio no se produjo la reapertura. Ahora abren con normalidad, por la mañana desde las 7:00 hasta las 9:00 horas y por la tarde desde las 18:00 hasta las 20:30 horas. «Nos encontramos a gusto con cómo ha quedado todo, está muy bonito, gracias a eso hemos podido restaurar la fachada y, aunque no te puedes alegrar del hecho, en cierto modo sí porque de lo malo siempre se saca algo positivo», ha declarado entre risas la hermana tornera.
A las religiosas les ha emocionado mucho la respuesta ciudadana. «Hemos visto el cariño de los conquenses, la gente se volcó y lo sigue demostrando, no estamos solas», ha enfatizado con agradecimiento. Lo que tampoco puede dejar de comentar es que ninguna imagen se quemara, sobre todo, porque nada más entrar hay un crucifijo de grandes dimensiones que no ha sufrido ningún daño. «Solo se han quemado las puertas y un banco que tiene la huella de algo que cayó del techo», ha exclamado sorprendida. Según su relato, ya solo falta colocar el cancel, que es el pequeño cuarto que hay al atravesar la puerta principal, sellado con puertas laterales para acceder al interior.
A las 17:30 horas toca limpieza
La madre abadesa, Inmaculada, ha dedicado unos minutos a confirmar que «todavía están pintando» la iglesia por dentro, mientras gestiona que se habilite una celda nueva para una hermana que está a punto de llegar de otro convento.
«No estaba incluido en el proyecto y mira por dónde los pintores han tenido la deferencia de pintar, aunque hay que rascar las paredes, no se puede dar otra mano de temple porque tiene muchas capas y desconchones, además no hubiera cubierto el humo», ha explicado. Y es que «limpiaron extraordinariamente bien con aspiradores industriales», pero a pesar de ello, la mancha gris del humo se quedó, por lo que están usando una pintura más apropiada. Sin embargo, considera que es una lástima que haya ocurrido esto tan solo un año después de que hubieran pintado la Iglesia, que llevaba 30 años sin tocarse.
La abadesa franciscana ha reconocido que «ha sido incómodo», aunque lo llevan «muy bien» y están «muy contentas». Lo que más han sufrido ha sido el humo. Según ha confesado, como cada tarde hay Misa a las 7:00 horas y cada domingo y festivo a las 12:30 horas, sobre las 17:30 horas es el momento de ponerse a limpiar. «Corremos el andamio donde se puede, barremos con serrín para no levantar mucho polvo, destapamos los bancos que los tenemos que recoger cada mañana después de laudes», ha enumerado. Pese a las tareas, lo hacen con gusto para que la iglesia quede «decente», a la vez que reconoce con entusiasmo que «ya es bonita por sí sola».
Se ha dado cuenta de dos cosas, que la gente «tiene cariño» al convento y que la restauradora Mar Brox ha hecho un «trabajo extraordinario», sin pasar por alto que «el Cristo se ha hecho famoso y suscita una gran devoción al no afectarle ni una chusta». De lo que se siente aliviada es de que no pasara nada más grave porque «hubiera sido una carga para toda la vida». Además, ha revelado que se acuerdan mucho de quien provocó el incendio con gasolina. «Estamos rezando por el pobre Joaquín para que lo traten y pueda hacer vida normal, hay quien dice que está suelto, pero la Policía nos aseguró que lo condenaron a 3 años y estaba en una cárcel de Toledo porque aquí no hay área de psiquiatría», ha detallado. Le da lástima ver las imágenes de la captura en la que no ofreció ninguna resistencia, lo detuvieron dos militares que pasaban por ahí.
El cancel, según ha vaticinado, estará terminado para Semana Santa: «Si no, no podrá entrar ni salir la Virgen de las Angustias», ha bromeado.
