«La alimentación se tiene que adaptar a nuestro estilo de vida»

Según Gema Torralba, nutricionista de Q Activa, la dieta ha de ejercerse de forma autónoma, sana, variada y sin frustraciones

Gema Torralba, nutricionista de Q’Activa, expone que los hábitos alimentarios hay que construirlos en base a las necesidades específicas de cada persona. Gema asegura que hay veces que los pacientes «esperan que desde la primera consulta se prescriba una dieta para seguirla», pero según la misma «cada persona es un mundo y no todas las dietas se pueden generalizar».

La especialista subraya que la individualización de los menús es algo esencial a la hora de plantear una pauta nutricional saludable y duradera en el tiempo. Para ello, Gema estudia de forma genuina los perfiles de cada uno de sus pacientes para poder reforzar o disminuir el consumo de ciertos alimentos. Factores como antecedentes familiares con patologías, la forma en la que una persona organiza su rutina alimentaria, hasta el hecho de comer solos, acompañados o delante de una cámara pueden influir en la forma en la que comemos.

Atención plena

Y es que, como afirma la nutricionista, en muchas ocasiones comemos distraídos y no practicamos lo que denomina como la «atención al plato». La especialista recomienda «no comer con la televisión, con el móvil o las tablets porque nos centramos en eso y no nos damos cuenta de lo que estábamos comiendo»; una atención plena que, tal como apunta, «se pude aplicar a la comida y a cualquier ámbito de la vida».

La especialista conciencia sobre la necesidad de un enfoque en el que la educación nutricional esté por delante de las dietas a fin de establecer una relación saludable con la comida «de forma realista», ya que «hay veces que si ponemos unos objetivos muy altos, los pacientes se frustran y al final no consiguen nada». Según la misma, el objetivo es generar autonomía en la forma de alimentarse de sus pacientes: «la alimentación se tiene que adaptar a nuestro estilo de vida».

Educación nutricional

Gema anima a cualquier persona a educarse en la nutrición para aprender a alimentarse de forma saludable con autonomía, sin la necesidad de seguir dietas restrictivas: «que puedan elegir sus alimentos y no se sientan aprisionadas». El bajar de peso no tiene por qué ser el único motivo por el que acudir a la consulta de Gema ya que, en muchas ocasiones, «el malestar diario se acaba pagando con la comida, cuando debe ser para disfrutarla», afirma la experta.

Los entornos psicológicos estresantes pueden derivar en trastornos como la ansiedad, lo que también puede influir en que establezcamos, como afirma la nutricionista, «una relación tóxica con la comida». Cuando la falta de tiempo y el estrés se vuelcan en los hábitos alimenticios, aparece la culpabilidad. «Hay una mala relación con la comida por haber llevado dietas restrictivas en que todo lo bueno está prohibido», reflexiona Gema y añade que esto nos está llevando a que se genere «miedo al comer» y que «no se disfrute tanto».

Mitos de la nutrición

Gema pone el acento en la necesidad de individualizar las dietas y desmiente algunos de los mitos que circulan en torno a la alimentación saludable. Se ha extendido la idea de que es necesario hacer cinco comidas diarias o la asociada al refranero español ‘desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un mendigo’. Gema niega ambas apoyándose en que las personas han de seguir sus propios hábitos «siempre que cubran sus necesidades energéticas y los nutrientes que necesiten a lo largo del día».

Por otra parte, la nutricionista de Q’Activa también desmiente que haya alimentos que al comerlos por la noche siempre sienten mal como se ha generalizado sobre el melón y la lechuga; o que la miel constituya un ‘super alimento’ para curar los resfriados, «no debemos olvidar que la miel es básicamente azúcar en un 80%». La especialista afirma que no hay que comer ningún alimento «con remordimiento» y que los alimentos menos saludables también «se pueden integrar de forma ocasional».

En conclusión, la nutricionista señala que educarnos a nivel nutricional no sólo es una vía para prevenir cualquier síndrome metabólico como puede ser el sobrepeso, la obesidad o la diabetes; sino que «una buena alimentación hace que rindamos mejor» en cualquier aspecto de nuestra vida.

Gema, que trabaja con un equipo multidisciplinar en Q’Activa, anima a complementar la dieta con ejercicio físico. En su clínica ofrecen actividades como pilates, hipopresivos, ejercicio terapéutico y zumba. Para obtener el asesoramiento de Gema y su equipo se pude llamar al teléfono 969 23 16 92 o contactar con ellos a través de su página web.