El Museo de Arte Abstracto de Cuenca ha presentado dos nuevas exposiciones de los fotógrafos Alberto Portera y Francisco Gómez sobre la ciudad y el Museo de los años 60. Junto a las dos anteriores, abiertas al público hasta enero de 2025, de los hermanos Blassi y Antonio Lorenzo, conforman una extensa muestra sobre los orígenes de la institución, culminando el centenario del nacimiento de Fernando Zóbel.
Javier Gomá, director de la Fundación Juan Marcha, ha agradecido que Fernando Zóbel fuera inspirador de esta comunidad y legara todo lo que había hecho en torno al Museo tras su fallecimiento en el año 84. «El tiempo produce un desgaste inevitable, pero hay instituciones como esta que viven una eterna primavera, celebramos 100 años de nacimiento del promotor, pero también su plenitud, no es normal que goce de tan buena salud», ha declarado. Ha recordado cuando les ofrecieron el Mesón para su ampliación, pero se negaron a que el Museo creciera a costa de un icono, y ahora, tras la pandemia, y terminadas las reformas para su climatización, se ha felicitado porque todo eso hiciera posible la gira con la selección de algunas obras también en EEUU y Alemania, con una estación en Madrid, que ha llegado a los 60.000 participantes.
Por su parte, Manuel Fontán, director de Museos y Exposiciones de la Fundación Juan March y del Museo de Arte Abstracto Español, ha manifestado que buscaban cerrar el Año Zóbel con esta jornada de puertas abiertas que incluye un acto musical a mediodía, un coloquio con el autor de la exposición Alberto Portera por la tarde y una ceremonia en el Parador para terminar. «La historia reciente ha sido tan pródiga con Zóbel como pródigo fue Zóbel con esta ciudad», ha expresado, «exponemos obras de los años 50 y 69 en condiciones museográficas equivalentes a las de otros países liberales». Precisamente, ha destacado la proyección internacional del Museo que en mayo viajará a la National Gallery de Singapur.
Ha remarcado la importancia de tener la obra gráfica de Los Blassi, dos hermanos que con 19 años visitan Castilla cuando Zóbel les dejó fotografiar el Museo, y ahora «sus libros, catálogos, postales, carteles hacen la labor de las redes sociales». También ha resaltado la exposición «Archivo Portera», que recoge la obra del catedrático y cineasta Alberto Portera, «son imágenes nunca vistas, un videoensayo de su fondo fílmico incomparable». En cuanto a la muestra de Francisco Gómez refleja su legado para una revista de arquitectura del 67, su exposición se traduce en un reportaje impecable sobre el Museo y sus alrededores, técnico y bien aplicado, que no busca la instantánea de la calle, sino las fotos raras, las del detalle y la textura.
En este sentido, la comisaria invitada Alicia Chillida ha aprovechado para remarcar que «este día es importante para Cuenca, ya que el Museo es una explosión de humanidad y del espíritu de Zóbel que se perpetúa con los años». A su juicio, el hecho de que Portera depositara sus filmaciones históricas en la Fundación «es digno de felicitación por su altruismo y fraternidad».
En definitiva, el Museo de Arte Abstracto de Cuenca continúa aumentando anualmente su número de visitantes, aunque el verdadero interés reside en la promoción de exposiciones y los proyectos educativos que atraen cada año a más de 9.000 estudiantes. Por último, se ha presentado el Archivo de Artistas Abstractos de España (AAAeA) que ofrece a los investigadores un diccionario de artistas abstractos con más de 1.000 entradas, y se ha anunciado para febrero de 2025 una nueva exposición de Cristina G. Rodero sobre la España oculta.