Cuatro especies de dinosaurios y una de ratón descubiertas en Cuenca en las tres últimas décadas

La reciente identificación del Qunkasaura pintiquiniestra ha supuesto que la investigación proponga un nuevo grupo de titanosaurios llamado 'Lohuecosauria'

La identificación de una nueva especie de dinosaurio del yacimiento de Lo Hueco ha vuelto a atraer las miradas respecto al valioso patrimonio paleontológico que hay en la provincia de Cuenca. Prueba de ello, por ejemplo, es que este jueves ‘Dinosaurios Cuenca’ es una de las tendencias de búsqueda de Google en España. Estos son cinco ejemplos que explican la importancia de los yacimientos paleontológicos conquenses y cuyos restos se encuentran expuestos en el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha ubicado en Ceunca capital.

Qunkasaura pintiquiniestra

El último de los dinosaurios gigantes descubiertos en Cuenca y dado a conocer al público en general este miércoles. Su nombre hace referencia a la provincia conquense, a Antonio Saura y a un personaje de Don Quijote de La Mancha.

El hallazgo se produjo en el año 2007, cuando se excavó el yacimiento encontrado en Fuentes durante las obras del AVE Madrid-Levante y se recogieron más de 12.000 fósiles, formando una de las colecciones de vertebrados más relevantes del Cretácico Superior de Europa y que 17 años después continúa en estudio y dando importantes noticias.

Este dinosaurio gigante era un saltasáurido opisthocoelicaudinom un grupo distribuido en el hemisferio norte (Laurasia) hace 75 millones de años. La mayor parte de los saurópodos del Cretácico Superior del suroeste de Europa, incluido Lohuecotitan pandafilandi, anteriormente descrito en Lo Hueco, serían lirainosaurinos, un grupo de saurópodos aparentemente exclusivo de Europa.

La investigación dirigida por la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa sugiere que Lo Hueco es el único yacimiento en el que se conoce la coexistencia de ambos grupos y propone un nuevo grupo de titanosaurios llamado Lohuecosauria, que incluye a los representantes de los dos linajes. Los lohuecosaurios pueden haber tenido su origen en los continentes del sur (Gondwana), antes de dispersarse a nivel global.

Foto: PePeEfe (CC 4.0.)

Lohuecotitan pandafilandi

En el año 2016 un grupo de investigadores del Grupo de Biología Evolutiva de la UNED describió el primer dinosaurio del Cretácico Superior en Lo Hueco. Su nombre homenajeó a uno de los gigantes del Don Quijote de Miguel de Cervantes, al ser uno de los últimos dinosarios gigantes de Europa.

Este saurópodo perteneciente al grupo de los titanosaurios, habitó el yacimiento hace 75 millones de años, cuando Europa era un archipiélago sometido a un clima subtropical.

Sobre él se conoce que fue hervíboro y cuadrúpedo, que medía entre 15 y 20 metros de longitud y que probablemente estaba dotado con una armadura compuesta de huesos y placas dérmicas en su dorso. Forma parte de la exosición permanente del Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha en Cuenca.

Spinolestes xenarthrosus

Foto: MUPA

En el año 2015 se describió en Las Hoyas una nueva especie de mamífero primitivo hoy extintos cuyo linaje surgió en los comienzos del Jurásico, hace aproximadamente 180 millones de años. Su nombre ‘El ladrón de espinas’ hace referencia a unas pequeñas estructuras en forma de tubos microscópicos en el lomo, en forma de diminutas espinas, y que hasta su descubrimiento no se conocían.

Era un animal pequeño, de unos 14 o 15 centímetros y unos 50-70 gramos, fisionómicamente parecido a un ratón, una musaraña y una zarigüeya modernas. Además, tenía una cresta que recorría su cuerpo y una melena parecida a la de los leones actuales, aunque más corta. Además, poseía un refuerzo en la columna vertebral muy raro que hoy sólo se conoce en perezosos, armadillos y osos hormigueros.

Un equipo internacional liderado por la Universidad Autónoma de Madrid presentó estudios que destacaban la extraordinaria preservación del fósil, gracias a la cual pudieron descifrar la evolución del esqueleto y de los tejidos blandos que caracterizan a las especies modernas. Sus restos revelaron las primeras evidencias evolutivas del pelo en mamíferos.

Foto: MUPA

Concavenator corcovatus

Conocido popularmente como ‘Pepito’, este ejemplar de dinosaurio terópodo descubierto en 2010 medía unos seis metros de largo y pesaba 500 kilos de peso. Vívía hace 125 millones de años en el actual yacimiento de Las Hoyas (La Cierva) y se trata del dinosaurio más completo hallado en España.

Tiene un estado de conservación extraordinario y se pueden apreciar a simple vista restos de tejidos blandos como piel y músculos, prácticamente como si hubiera sido momificado, así como posibles restos estomacales en su cavidad toráciva.

‘Pepito’ pertenece al grupo de los Carcharodontosauria, uno de los grandes depredadores que habitaron en el Cretácico. Se caracteriza por una estructura dorsal similar a las jorobas que tienen algunos mamíferos actuales.

En 2018 dio el salto a Hollywood de la mano de José Antonio Bayona, que dirigió Parque Jurásico ‘El reino caído’, y lo incluyó en tres escenas situadas en una biblioteca-museo.

Foto: MUPA

Pelecanimimus polyodon

El más antiguo de los hallazgos, fechado en el año 1993 en Las Hoyas por Armando Díaz Romeral, esta especie única cuya identificación supuso una revolución en la paleontología. Su nombre, que significa aproximadamente ‘imitador de pelícanos con muchos dientes’, le fue dado por ser el terópodo con más dientes conocido. Fue el primer dinosaurio no aviano articulado indentificado en España, y representó el primer registro en Europa de un ornitomimosaurio, animales parecidos a las modernas avestruces.

Este fósil, que se encuentra expuesto en el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha, está en un excepcional estado de preservación. Se conserva la mitad anterior de un esqueleto, incluidos los dos brazos completos y el cráneo.

Es por ello que pese a ser el único ejemplar conocido de su especie, ha proporcionado una gran cantidad de información a los investigadores. Por ejemplo, hace tan sólo tres años un estudio de la Universidad Autónoma de Madrid y la Universidad a Distancia reveló nuevos detalles sobre la evolución anatómica de este grupo de dinosaurios emparentados con las aves modernas.

Pelecanimimus es el único ornithomimosaurio que conserva un esternón osificado, lo que indica que yo poseía un mecanismo de respiración parecido al de las aves actuales. Su morfología es similar a otros manirraptoriformes como el famoso Velociraptor de la película original de Parque Jurásico dirigida por Steven Spielberg.