Las entradas para el concierto que José Luis Perales ofrecerá en el estadio de La Fuensanta de Cuenca el próximo 21 de agosto se han agotado «temporalmente», según informa la web oficial del cantautor natural de La Alcarria conquense. Si se accede al espacio habilitado para la compra virtual de entradas en espacio o en el portal de El Corte Inglés, el mensaje que reciben los interesados es «el límite de aforo establecido no permite actualmente la venta de este espectáculo». Tampoco es posible adquirir las localidades en los espacios de venta presenciales, como la oficina de la agencia de viajes de los grandes almacenes situada en la Plaza de la Constitución de Cuenca.
El pasado lunes, 14 de junio, comenzó a las 12:00 horas la venta de las 4.726 entradas ofertadas, cuyos precios oscilaban entre los 38,50 y los 60,50 euros. En apenas dos días se agotaron todas las de pista y en menos de cuatro lo han hecho todas las disponibles.
Había ganas y expectación por ver y escuchar al autor de «¿Y cómo es él?» en el que quizá sea su último concierto en su tierra ya que la cita del 21 de agosto forma parte de su gira de despedida de los escenarios. Tras cinco años desde su último recital en la capital conquense, celebrado en la Plaza de Toros en junio de 2016 dentro de los actos conmemorativos del XX Aniversario de Cuenca como Patrimonio de la Humanidad, los fans del intérprete de Castejón no han querido especular y se han lanzado a asegurarse su ticket para el espectáculo.
La visita este martes de Perales a Cuenca para asistir al acto en el que se le dio su nombre al Teatro Auditorio y la atención mediática recibida también ha servido de espaldarazo para promocionar la cita musical, que coincidirá con la Feria y Fiestas de San Julián.
Para aquellos que se hayan quedado sin asiento todavía existe un resquicio de esperanza. La cantidad de localidades ofertadas dependía de las normas de aforo para espectáculos públicos existente en aquel momento en Castilla-La Mancha. Si la capacidad permitida se va ampliando por las autoridades (con la modificación del decreto anticovid que entró en vigor este jueves se permite, por ejemplo, que los convivientes puedan sentarse juntos sin necesidad de dejar sitios vacíos intermedios), es posible que la organización saque a la venta otra remesa de entradas, una segunda oportunidad para los más rezagados. De ahí que la organización prefiera hablar de «agotadas temporalmente» antes de dar tajantemente por completo el evento.