Un águila calzada con una fractura en uno de los húmeros ha ingresado este miércoles en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Albaladejito. Se trata del último ‘paciente’ que ha llegado para su habilitación. Posteriormente, ingresó un cadaver de milano negro para determinar la causa de la muerte.
El veterinario del Centro, Miguel Ángel Verona, ha indicado que el áquila calzada procede de la zona de Motilla del Palancar y requerirá posiblemente una intervención quirúrgica que puede resultar complicada dadas las características de la lesión. Esta especie de rapaz es un ave migratoria que pasa la temporada estival en la Península Ibérica. No está catalogada entre las especies que requieren medidas especiales protección dado que sus poblaciones son estables aunque están amenazadas por la pérdida de su hábitat debido a la deforestación, la persecución por parte de los humanos y el descenso de sus presas favoritas.
Por otro lado, continúan su recuperación en el Centro de la capital conquense sendos pollos de búho real y búo chico. El primero evoluciona de forma favorable y la próxima semana podría ser trasladado al voladero. Por su parte, el segundo ha superado la fase de recuperación más delicada y es capaz de alimentarse por sí mismo.
Un somormujo y un autillo han sido las últimas aves que han sido reintroducidas en el medio natural tras a puesta en libertad de un águila real y un buitre leonado recientemente.
