La Catedral de Cuenca es el monumento más visitado de la ciudad y recibe multitud y variados turistas. El más singular es, hasta el momento, una garduña que se ha asentado en al Patio de la Limosna y la seo conquense ha solicitado la colaboración de los conquenses para poner nombre al simpàtico mustélido.
En un mensaje publicado en el perfil oficial de las redes sociales, la Catedral señala que «a nuestra garduña también le gusta la Catedral bajo la nieve. ¿Queréis que le pongamos nombre? ¿Cuál le pondrías? Nosotros hemos comenzado a llamarla provisionalmente Condulmaria… ¡Queremos vuestras propuestas!».
La garduña es un depredador nocturno que fue ‘cazado’ recientemente por las cámaras durante una de sus habituales rondas por el patio de la Limosna.