La candidata de Vox a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha visitado este viernes la ciudad de Cuenca acompañada de Rafael Rodríguez, candidato de Vox a la alcaldía de Cuenca y del cabeza de lista por Cuenca a las cortes de Castilla-La Mancha, Jesús Manuel de La Huz. En su atención a los medios, Monasterio ha señalado que el propósito de su partido de cara a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo será «ganar el mayor número de votos posibles, tener la fuerza de los conquenses para tener un proyecto y una ilusión de futuro» porque «están hartos de gobiernos que cada cuatro año protemeten lo mismo, parece el día de la marmota», ha señalado en la plaza de la Hispanidad de Cuenca, junto al monumento a los soldados de África.
Monasterio ha explicado que «si uno se lee las declaraciones de los gobiernos anteriores, llevan prometiendo las mismas infraestructuras durante cien de años. Se acabó, hay que hacer un cambio de rumbo, generar ilusión y tener un objeto y una forma de generar riqueza con el turismo fomentando la industria, ayudar al pequeño comercio y a las familias para cambiar el rumbo de Cuenca», ha argumentado.
Preguntada por un posible pacto de gobierno con el Partido Popular tras los próximos comicios electorales, Rocío Monasterio se ha reiterado en sus declaraciones y ha explicado que «nosotros estamos es en ganar el mayor número de votos y tener fuerza para gobernar» y ha añadido que «hasta que no gobierne Vox, los problemas de Cuenca no se acabarán».
Por su parte, el candidato a la alcaldía de Cuenca, Rafael Rodríguez, en la línea de Monasterio, ha señalado que el futuro de la capital conquense pasa por «un cambio radical de políticas municipales». Rodríguez ha defendido que atraer a empresas y la defensa a los emprendedores es «fundamental» para combatir el envejecimiento y el éxodo de jóvenes a otras partes del país para encontrar oportunidades.
Por otra parte, el candidato del partido de Santiago Abascal a la alcaldía conquense, Rafael Rodríguez, ha defendido las infraestructuras de comunicación de la provincia, argumentando que la estación de tren convencional representa una metáfora de la propia ciudad porque se encuentra «abandonada por los diferentes partidos que han ido pasando en los últimos treinta años», y ha añadido que «hay que revertir esa situación para que no se cierre la estación de tren convencional y no se desmantele este servicio porque podríamos utilizarla para atraer empresas e inversión».