Renfe continúa sin recuperar sus trenes de Alta Velocidad y Larga Distancia más madrugadores a Madrid pocos días antes del inicio del nuevo curso. Una ausencia que complica el regreso a la rutina de muchos conquenses que viven en Cuenca pero trabajan en la capital de España, y cada día van y vuelven para desarrollar su trabajo.
Según se puede comprobar en el portal para adquirir billetes de la web de Renfe, la opción más madrugadora que disponen los conquenses para viajar a Madrid en tren es el AVE que llega a las 9:32 horas a la estación Puerta de Atocha. Este convoy parte desde la Estación Joaquín Sorolla de Valencia a las 7:40 horas, y hace su parada en la Estación Fernando Zóbel a las 8:38 horas.
Además, los usuarios también tienen la posibilidad de comprar billetes para el AVE que para en la Estación Fernando Zóbel a las 8:42 horas, pero en este caso llegarían como pronto a Madrid a las 9:42 horas. En sentido inverso, Madrid-Cuenca, hay activos un total de nueve servicios, siendo la salida del primero de ellos a las 7:40 horas y la llegada del último a las 22:14 horas.
Estas dos posibilidades que Renfe oferta en la actualidad tienen unos horarios que son completamente incompatibles con la jornada laboral más extendida, que da comienzo a las 8:00 horas.
Y es que la recuperación de la venta de billetes para viajar en sus trenes AVE y Larga distancia tras el confinamiento y el periodo más duro de la pandemia hasta el momento no supuso la puesta en marcha de todos los servicios que anteriormente ofertaba la compañía ferroviaria. Así, dejaron de circular los convoyes con llegada a las 8:23 horas y a las 8:51 horas.
En cuanto a la conexión por Alta Velocidad entre la capital conquense y Valencia, Renfe oferta un total de cinco servicios, el primero de ellos con salida a las 8:35 horas desde la capital conquense y llegada a las 9:33 horas y el último con llegada a la Estación Joaquín Sorolla a las 23:03.
En el comunicado emitido por Renfe dando a conocer la reactivación de la venta en junio advertía que la oferta de frecuencias y trenes se iría ampliando “en función de la demanda y la ocupación de los trenes”, indicando en este punto que se haría “hasta recuperar los niveles previos a la crisis”.