La Plataforma en Defensa del Patrimonio ha iniciado una campaña, dirigida al Ayuntamiento de Cuenca, para evitar la sustitución de los faroles tradicionales del Casco Antiguo y mantener «su tenue color e intensidad, sus cristales y sus formas».
Según la argumentación detallada en la campaña puesta en marcha en change.org, «actualmente el Ayuntamiento de Cuenca está llevando a cabo la segunda fase de renovación del alumbrado público de la ciudad, que prevé cambiar el 90% del alumbrado público, sustituyendo las actuales luminarias por otras con iluminación led. Este proyecto abarca también a las zonas del casco antiguo de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1996, así como al centro; donde se está llevando a cabo la eliminación de los tradicionales faroles con luz cálida e intensidad tenue que alumbran estas dos zonas por unos nuevos sin cristales y con luces led blancas que convierten a nuestra ciudad en un espacio gris y frío. Acabando así con nuestra identidad y con la esencia cálida y amable de nuestra ciudad».
Estas mismas fuentes señalan que «consecuencia de la primera fase de este proyecto es, entre otros lugares, nuestra querida calle de los Tintes, perteneciente ya al casco antiguo, donde podemos ver el desafortunado resultado de la renovación que se está ejecutando. Ciudades históricas como Toledo, Segovia o Santiago de Compostela siguen poseyendo su iluminación cálida y faroles tradicionales. No podemos permitir que acaben con la belleza y calidez de nuestra ciudad antigua. No permitamos esta agresión estética intolerable».
Por último, realizan un llamamiento a los responsables políticos de la corporación municipal. «Autoridades del Ayuntamiento, rectificad, escuchad a vuestros ciudadanos. Los conquenses no queremos luces blancas y frías, no queremos nuevos faroles. Queremos mantener nuestra iluminación, queremos mantener la belleza de nuestra ciudad».