Los hosteleros esperan que San Julián mantenga la atracción de visitantes al mismo ritmo que el año pasado

La Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo afirma que estarán por debajo de otros años, como los de post-pandemia.

Este jueves comienza la Feria y Fiestas de San Julián en la capital conquense y durante 11 días la ciudad se llenará de vecinos y vecinas que salgan a disfrutar del ambiente, así como de visitantes que vengan a ver algunos de las actividades y espectáculos programados para estos días. La previsión para la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo de Cuenca es que el número de turistas y visitantes sea como el de otros años, aunque remarcan que estos meses de verano son temporada baja en general para la provincia.

El presidente de la agrupación hostelera, José Manuel Abascal, aclara que la Feria «moverá gente por los toros, los espectáculos, pero más o menos será igual que el año pasado». Destaca que será una media normal y por debajo de algunas anteriores como las de post-pandemia. «Fue una época en la que todo estaba cerrado y la gente solo se movía a lugares pequeños como a Cuenca, entonces nosotros nos beneficiamos de eso. Ahora que esta todo abierto, hemos vuelto a la realidad y la ocupación es mas baja con respecto a esos años», asegura el presidente de los hosteleros.

Campaña de verano

Por otra parte, Abascal asegura que de lo que llevamos de campaña de verano en cuanto a ocupaciones y visitantes, el mes de julio ha repuntado ligeramente con respecto al mismo mes del año pasado. En agosto, ese número se va manteniendo «y hay que esperar a que pasen las Ferias», dice el presidente de la agrupación hostelera, aunque incide en que estos meses de verano son temporada baja para la provincia «y los precios son otros, bastante bajos».

El presidente de la Agrupación Provincial de Hostelería destaca que estos datos no significan que sea una ganancia mayor que la del año pasado para los hoteles, ya que «estamos en el último año y medio de devolución de ICOS y tienes que hacer frente a las deudas contraídas después de la pandemia». «La conclusión es que la ocupación es mayor que el año pasado, pero no así los beneficios, porque hay muchos gastos que cada año hay que renovar y no van a la par», concluye Abascal.