El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha subrayado este jueves que «a pesar de la crisis sanitaria y del coste económico derivado de la misma, no voy a dejar en tierra ni uno solo de los hospitales que están en obras”, en referencia, entre otras infraestructuras, al nuevo Hospital de Cuenca.
Tampoco se van a descartar, ha indicado el dirigente económico, «ni las inversiones en sanidad, el incremento paulatino de las plantillas o las obras que ya se estaban acometiendo en los centros de salud».
Por otro lado, el jefe del Ejecutivo castellano-manchego se ha mostrado esperanzado por los datos “cada vez mejores” que, en materia sanitaria, registra la región. En el día de ayer solo el 14% de los pacientes que fueron sido atendidos en urgencias presentaba casos de COVID-19 y solo el 26% de los que se han quedado ingresados lo han hecho por esta causa, ha confirmado.